La primera etapa del programa de reubicación de los damnificados por el derrumbe del cerro El Chiquihuite, en Tlalnepantla, anunciado por el gobierno federal, se perfila para comenzar en abril del próximo año, de acuerdo con un proyecto de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), que planea construir una unidad habitacional con alrededor de 200 viviendas en un predio de la zona oriente del municipio, informó el diputado local con licencia temporal, Max Correa.
En entrevista, señaló que en recientes reuniones con autoridades de la Sedatu y del gobierno municipal, la dependencia notificó que la Comisión Nacional de la Vivienda (Conavi) será la encargada del financiamiento de las obras, que requieren una inversión estimada entre 38 y 40 millones de pesos para construir siete edificios de cinco niveles en un terreno de aproximadamente cinco mil metros cuadrados donado por el gobierno municipal.
Correa dijo que el Cabildo de Tlalnepantla ya autorizó la desincorporación del predio de propiedad municipal donde se edificarán las viviendas, el cual está ubicado en la colonia Jorge Jiménez Cantú.
El siguiente paso es remitir el proceso de desincorporación al gobierno del Estado de México para que este lo envíe al Congreso local para su aprobación.
“Me acabo de reunir con el presidente municipal de Tlalnepantla y con la Sedatu para que la palabra del presidente Andrés Manuel López Obrador se cumpla con los desplazados del Chiquihuite, por el deslizamiento del cerro; ya se autorizó la desincorporación del predio en el Cabildo”, expuso el diputado.
Las viviendas tendrán 65 metros cuadrados con tres habitaciones, dos baños, estancia y comedor.
En la primera etapa de construcción se darán las viviendas a las familias de la zona cero, de quienes se tuvo que
derrumbar su casa.
CAR