La violencia ha sido una de las formas en las cuales se ha logrado ejercer control por parte de los grupos criminales, estas agresiones y amenazas, también han permeado en la política, así lo aseguró Rubén Salazar, director de Etellekt, en entrevista con Javier Alatorre para la señal de radio de El Heraldo Media Group.
Informó que al menos 61 ediles han sido asesinados en el país durante el sexenio y que la cifra sube a 95 casos si se toman en cuenta los datos desde el año 2000. Aseguró que estos actos suelen ser perpetrados para obligar a los aspirantes a puestos políticos para renunciar a las campañas o a los funcionarios para dejar sus funciones a favor de alguien afín a estos delincuentes.
"A través de la violencia las intimidan, las hostigan para obligarlas a dejar el cargo", dijo el experto, quien dio a conocer los cinco estados en los que más se presenta esta práctica:
- Oaxaca
- Guerrero
- Veracruz
- Michoacán
- Estado de México
Es cada vez mas riesgoso
Durante la conversación, el experto dijo que uno de los mayores problemas en torno a la impunidad relacionada con los ataques hacia la clase política es que las autoridades federales no tienen a atraer los casos para investigarlos. Los intereses personales de las fiscalías estatales, dijo, pueden ser obstáculos a la hora de realizar algunas pesquisas.
Aseguró que en el caso de que las víctimas sean opositoras, estas dependencias locales pueden prejuzgar sobre los móviles e inclusive pueden dar carpetazos sin bases que lo sustenten o asegurando que los homicidios se llevan a cabo bajo la figura de un ajuste de cuentas.
Indicó que los encargados de las fiscalías tienden a ser nombrados por los gobernadores, lo cual pone en entredicho su autonomía o si trabajen por medio de consignas políticas. Esto, lamento, deja en peligro de padecer una extrema violencia a todas las personas que aspiran o ejercen un cargo público
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