De acuerdo con el último reporte del Panorama Epidemiológico de Dengue 2021, la Secretaría de Salud informó que ya se registran 5 muertes y mil 353 casos confirmados de dengue en México en lo que va del año.
De acuerdo con el documento oficial, el 71% de los casos confirmados corresponden a Morelos, Veracruz, Guerrero, Oaxaca, Estado de México y Michoacán.
¿Cómo se transmite el dengue?
Según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), el dengue se transmite a través de la picadura de mosquitos infectados, principalmente hembras de la especia Aedes aegypti. Cabe mencionar que dichos insectos también transmiten la fiebre chikungunya, el virus de zika y la fiebre amarilla.
El dengue tiene un comportamiento estacionario, es decir, en el hemisferio Sur la mayoría de los casos ocurren durante la primera mitad del año, en cambio, en el hemisferio Norte, los casos ocurren casi siempre en la segunda mitad. Este patrón de comportamiento corresponde a los meses más cálidos y lluviosos.
De acuerdo a la Organización Panamericana de la Salud (OPS), el Aedes aegypti presenta el mayor riesgo de transmisión en las Américas y está presente en casi todos los países del hemisferio, excepto Canadá y Chile.
Es un mosquito doméstico, que vive en y cerca de las casas y se reproduce en cualquier recipiente artificial o natural que contenga agua. Donde más se presenta es en los climas tropicales y subtropicales, tanto en las zonas urbanas y semiurbanas.
¿Cuáles son los síntomas?
Es una enfermedad que afecta a personas de todas las edades, con síntomas que varían entre una fiebre leve a una fiebre incapacitante, acompañado de dolor intenso de cabeza, dolor detrás de los ojos, dolor en músculos y articulaciones, y eritema. La enfermedad puede progresar a formas graves, como dificultad respiratoria o daño grave de órganos.
¿Cómo lo puedo prevenir?
La SSA recomendó mantener todas las medidas de higiene: "Cubre todos los botes y recipientes en los que pueda almacenarse agua", difundió a través de Twitter.
Además, otras recomendaciones son:
- Cubrir, vaciar y limpiar los recipientes o espacios donde se almacena agua para uso doméstico, por lo menos una vez a la semana.
- Tener mosquiteros en las ventanas.
- Usar ropa de manga larga.
- Aplicar repelentes e insecticidas.
- Deshacerse de los desechos sólidos y los posibles espacios para los mosquitos.
En caso de picaduras y tener fiebre, se debe consultar al médico.