La Cámara de Diputados aprobó ayer la reforma a la Ley de Hidrocarburos que propuso el presidente Andrés Manuel López Obrador agregando una adenda al dictamen, con la que se busca garantizar el debido proceso cuando las autoridades suspendan permisos de refinación, almacenamiento, transporte y comercialización de hidrocarburos, petrolíferos o petroquímicos, estableciendo plazos y el derecho de audiencia de los afectados.
Y es que la reforma faculta a la Secretaría de Energía (Sener) y a la Comisión Reguladora de Energía (CRE) de suspender dichos permisos a las empresas público y privadas “cuando se prevea un peligro para la seguridad nacional, la seguridad energética o para la economía nacional”.
“La iniciativa enviada por el Ejecutivo federal está plenamente fundada y motivada a partir de los esfuerzos por superar nuestra dependencia energética. Reflejada la importación de 70 por ciento de combustibles que nos convierte en el país petrolero que más gasolina importa en el mundo”, aseguró el presidente de la Comisión de Energía de San Lázaro, Manuel Rodríguez, al presentar el dictamen.
La modificación fue hecha desde la Comisión de Energía, agregando una adenda al Artículo 59 Bis de la Ley de Hidrocarburos en la que se establece que la suspensión del permiso tendrá que ser con notificación al permisionario indicando las causas que motivan la suspensión, y dándole 15 días naturales para defenderse.
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Por Iván E. Saldaña
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