Diversos conductores de las plataformas Uber, Didi y Cabify se manifestaron en el estado de Puebla para sumarse al Paro nacional, y con ello a las quejas en el país, las cuales demandan mejoras en las condiciones de seguridad y que se homologuen las tarifas, ya que sólo se quedan con el 30 por ciento del cobro total del viaje.
Con el Paro nacional, las unidades realizaron un recorrido por calles de la ciudad de Puebla hasta llegar a las oficinas de las plataformas, en dónde realizaron una clausura simbólica, para ello los vehículos tenían escritas consignas como: “Tarifas Justas”, “No Más Bloqueos,” y “Seguridad para el conductor”.
Las exigencias
Raúl González Castillo, representante del Comité de Plataformas Puebla (COPP), comentó que la intención es que se realicen reuniones de trabajo con las empresas para lograr una regulación de comisiones hacia los conductores, y que éstas sean homologadas con los taxis mercantiles.
Como ejemplo mencionó que en un viaje de 100 pesos, 30 son para la plataforma, mientras que 20 son para los pagos de impuestos y otros 20 pesos para el pago de gasolina; por lo tanto los conductores sólo reciben 30 pesos del total, además de esto hay que considerar que existen varios choferes aún están pagando las unidades.
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“Muchos de los que tenemos unidades, pues nos quedamos con las deudas, son de 250 o 300 mil pesos y eso no lo ven, ahora si nos las roban con que vamos a trabajar y a pagarla, son cosas que a las plataformas no les importa”, dijo González Castillo.
Cabe mencionar que desde el pasado 23 de marzo se realizó en redes sociales una convocatoria en Puebla para que los conductores y repartidores de dichas plataformas digitales se sumaran al Paro nacional para exigir tarifas justas, pues ante la situación por la pandemia se han reportado menores ingresos.
Asimismo, el bloqueo se dio para pedir seguridad para los choferes, mismos que han presentado varias denuncias, entre ellas la realización de viajes en distancias largas, agresiones, robos de vehículos e incluso casos de secuestro.
Por Claudia Espinoza
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