El bebé de un año y 11 meses de edad, Arnoldo Saúl Sánchez Gómez fue asesinado a golpes por su padrastro en el barrio de María Auxiliadora en San Cristóbal de Las Casas, Chiapas.
Para ir a trabajar, Sandra dejó a su hijo con su entonces pareja sentimental Rolando Armando “N”, con quien mantenía una relación de más de un año. Cuando se encontraba laborando, recibió una llamada de su pareja aceptando que golpeó al niño porque no dejaba de llorar.
Sandra regresó a su domicilio y encontró a su hijo inconsciente y con golpes en todo el cuerpo. Cambió el pañal del bebé, “porque estaba sucio”, y lo llevaron al médico, pero la institución pública se negó a recibirlos.
En un sanatorio particular, señalaron que el menor sufrió dos infartos, para el segundo su cuerpo no resistió. Rolando Armando “N” fue detenido por el Ministerio Público de la Fiscalía de Justicia Distrito Altos. En un video difundido por la madre del menor, señala que la autoridad nunca le dio razón del asesino de su hijo, “lo están escondiendo”. Posteriormente, la FGE de Chiapas lo dejó en libertad y ahora está prófugo de la justicia.
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Según Sandra, el sujeto pertenece a una organización social de mucho poder en los Altos de Chiapas. Incluso, uno de los dirigentes le ofreció dinero para los gastos funerarios con la intención de que retire la denuncia judicial. Pero, otras organizaciones, grupos de feministas y activistas se unieron al llamado de justicia, asimismo, movimientos sociales señalaron que harán justicia por propia mano si la autoridad hace caso omiso al asesinato del bebé.
Por Jeny Pascacio
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