Cada mes, la Procuraduría de Protección al Ambiente del Estado de México (Propaem) recibe entre 80 y 100 denuncias por maltrato animal, de las cuales, 90 por ciento corresponden a agresiones cometidas en contra de perros; 5 por ciento, felinos; 4 por ciento, equinos; y 1 por ciento, otras especies.
Información de la dependencia, obtenida a través de transparencia, señala que los municipios mexiquenses donde se reciben el mayor número de denuncias son: Toluca, Nezahualcóyotl, Naucalpan, Tlalnepantla y Tecámac.
De acuerdo con colectivos de protección animal, durante la pandemia aumentó el maltrato de mascotas, ya que este precede a la violencia intrafamiliar, que también se elevó durante el confinamiento, aunque no se tienen cifras oficiales.
“Durante la contingencia sanitaria, se tienen estimaciones de que aumentaron 50 por ciento las agresiones a los animales. La gente estaba cansada del encierro, las personas se pusieron violentas, empezaron con los animales y luego con la familia”, expuso Rosalba Celorio San Román, encargada del santuario Chester, Fausto y Rocky A.C, ubicado en Huixquilucan.
Agregó que “otro un indicativo del maltrato es el abandono de mascotas, que también se elevó el año pasado, calculamos que hasta 60 por ciento”.
La diputada local Krishna Romero señaló que en el país hay alrededor de 23 millones de perros, de los cuales sólo 5.4 millones tienen un hogar, por lo cual en el estado urge legislar en reformas que promuevan la protección de animales, y evitar su abandono y maltrato.
La crueldad animal está tipificada como delito en el Edomex. El Código Penal estatal establece que quien cometa dicho crimen y ocasione lesiones dolosas a cualquier animal, se le impondrá una pena de seis meses a cuatro años de prisión y de 150 a 300 días de multa.
La misma pena será aplicada a quien abandone a cualquier animal, dejándolo expuesto a riesgos que amenacen su integridad. Aquellos que ocasionen la muerte de un animal podrían enfrentar de tres a seis años de prisión y de 200 a 400 días de multa.
MAAZ