El príncipe Harry confesó por primera vez cómo se sintió tras la muerte de su madre, Lady Di. En una carta dirigida a los integrantes de Scotty´s Little Soldiers confesó su sentir tras el trágico momento que marcó su vida y escribió que perder a uno de los padres en la infancia puede ser “abrumador y aislante”.
Esta es la primera vez, que el menor de los hijos de princesa Diana, habla sobre el duelo que vivió cuando apenas tenía 12 años, y hace una profunda reflexión sobre la pérdida de uno los progenitores a edad temprana. El texto muestra a un Harry sincero y conmovido por ese dólor y cita:
“Puede ser abrumador y aislante. Sin embargo, en medio de ese dolor encontramos fuerza en el amor y los recuerdos que dejamos atrás y he visto cómo comunidades como la suya pueden ofrecer un profundo consuelo y curación”.
Harry destaca los valores familiares en esta carta
El mensaje continúa haciendo una reflexión sobre los valores familiares que son una guía fundamental para superar un proceso de duelo y reconoció que el contar con apoyo en un momento así es clave para salir delante del trance doloroso.
“Al reunirnos para apoyarnos unos a otros, no sólo honramos los recuerdos de nuestros seres queridos, sino que también forjamos lazos que pueden llevarnos y nos llevarán en los momentos más difíciles. Las lágrimas y las risas, las experiencias compartidas y los momentos de alegría que crean juntos son poderosos recordatorios de que el amor perduran”.
Harry y la trágica muerte de su madre
La muerte de Lady Di, el 30 de agosto de 1997 fue impactante a nivel mundial, además de un claro golpe para la corona británica, pues dejaba huérfanos a sus dos hijos de sólo 12 (Harry) y 15 (William) años, ella sólo tenía 36 años y en torno a su trágica muerte se hablaron muchas cosas, incluso se pensó que había sido víctima de un atentado por parte de la propia corona, pues no era conveniente la relación amorosa que tenía con Dodi Al-Fayed.
Harry habló en su autobiografía, publicada en enero del 2023, de cómo fue el momento cuando su padre, el rey Carlos III, le comunicó a él y su hermano la terrible noticia: “Mamá ha tenido un accidente de auto”, dijo su padre al tiempo que les expresó que todo iría bien.
“Me miró de un modo extraño, con una expresión que nunca le vi antes. ¿Con miedo? Se sentó al borde de la cama y me puso una mano en la rodilla”.
En ese mismo libro, Harry confiesa que tuvo la necesidad de viajar a París y cruzar a 104 kilómetros por hora el túnel donde su madre perdió la vida. “Llegamos a la boca del túnel y pasamos por encima del bache de la entrada, que supuestamente sacó de la carretera el Mercedes de mamá. Pero el golpe no fue nada”.
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