La mañana del lunes 4 de noviembre de 2024, la ciudad de Río de Janeiro, capital de Brasil, fue escenario de un macabro hallazgo en la comunidad Viegas, en el barrio Senador Camará, cuando el cuerpo sin vida de una joven de 22 años fue encontrado dentro de un refrigerador en su propia casa.
La víctima fue identificada como Milena Vitória García de Barro, y la encontró su padrastro dentro del electrodoméstico, gracias al aviso de vecinos que se preocuparon por la joven después de una rápida visita de su expareja en la que se escucharon gritos y forcejeos hasta que salió con los menores.
Milena vivía en su hogar junto a sus dos hijos pequeños, de 5 y 2 años, y estaba separada de su esposo, Marcos Vinicius, quien se ha convertido en el principal sospechoso del crimen. A pesar de la ruptura, la joven le permitía a su ex pareja ver a los niños ocasionalmente.
Sin embargo, este hecho se torna aún más sombrío cuando se revela que Milena había compartido en sus redes sociales imágenes y mensajes que alertaban sobre la violencia doméstica que sufría a manos de Marcos, lo que podría haber sido un indicio de lo que estaba por ocurrir.
Créditos: Redes Sociales
¿Qué fue lo que pasó con Milena?
De acuerdo con el relato de la familia y algunos testigos, el viernes previo al hallazgo del cuerpo, Marcos había llegado a la casa de Milena para recoger a su hijo menor, quien iba a pasar el fin de semana con él. Sin embargo, poco después de la visita, la joven recibió un mensaje escalofriante de su ex pareja, quien le dijo:
"Nunca más volverás a ver a tu hijo".
Créditos: Archivo El Heraldo de México
La situación, que ya parecía alarmante, se tornó aún más sospechosa cuando Marcos regresó esa misma madrugada a la casa, aparentemente para hablar sobre los desacuerdos que mantenían. De acuerdo con los vecinos, Milena permitió que Marcos entrara a su vivienda, pero después de un tiempo, el hombre salió apresuradamente, llevándose consigo a los dos menores y una mochila.
Al llegar a la casa, el padrastro, que tenía una llave de repuesto, logró entrar y se encontró con una escena desgarradora. El refrigerador de la cocina, que estaba en el suelo, despertó su sospecha. Al abrirlo, encontró el cuerpo sin vida de Milena, con claros signos de haber sufrido violencia.
Horas después del hallazgo, Marcos Vinicius, quien había dejado a los hijos en casa de un familiar, se presentó ante la policía y se entregó voluntariamente. El caso fue puesto bajo la investigación de la Comisaría de Homicidios de la capital, y la escena del crimen fue acordonada para la intervención de los forenses.
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