Christina Booth y su esposo se encontraban en casa durante una noche de invierno de 2015. Ambos se disponían a descansar luego de mirar una película en la comodidad de sus sala, sin embargo, su noche de cine se convirtió en un atroz intento de asesinato, pues Booth cortó las gargantas de sus tres hijos pequeños para callar su llanto.
De acuerdo con las autoridades de los suburbios de Olympia, Washington, Christina Booth en su declaración oficial señala que su esposo, un soldado, se "enojaba" cuando los niños lloraban, por lo que decidió atacar a su hija de dos años y a sus gemelos de seis meses en busca de mantener la casa "en silencio" para finalizar la noche en la que habían visto una película mientras disfrutaban de palomitas de maíz y un par de latas de cerveza.
A pesar de su declaración, los investigadores señalaron que la historia del crimen tenía más que un terrible ataque a sus hijos, pues Christina sufría de un trastorno de estrés postraumático grave con relación con eventos traumáticos de su propia infancia, y además luchaba contra la depresión posparto. Es muy importante señalar que el trastorno de estrés postraumático grave (conocido como TEPT grave) puede desarrollarse después de haber experimentado o presenciado un evento traumático extremadamente estresante.
Christina Booth y su difícil infancia
De acuerdo con medios locales, la madre adoptiva de Christina Booth, Karla Petersen, declaró que Booth presenció la violación y el asesinato de su madre biológica cuando tenía apenas dos años, y posteriormente sufrió negligencia y abuso en una casa hogar.
Un año después Booth se unió a la familia de Petersen, cuando tenía cuatro años de edad, antes de haber sido gravemente traumatizada. La madre adoptiva explicó que a una edad temprana a Booth se le diagnosticó TEPT y más tarde luchó contra la depresión posparto en su adolescencia cuando dio a luz a un hijo.
Sin importar sus traumáticos comienzos, Booth a lo largo de su vida impresionó a muchas personas como alguien "alegre" o "entusiasta". Al paso de los años se casó con Thomas Booth, un soldado, y pronto quedó embarazada de su primera hija. Apenas unos meses después del nacimiento de su hija, Thomas fue desplegado a una misión, por lo que Christina sufrió nuevamente de TEPT. Un año después del nacimiento de su hija, Booth quedó embarazada de gemelos y sufrió complicaciones que volvieron a desencadenar su TEPT.
¿Cómo fue el ataque de Christina a sus hijos?
De acuerdo con medios locales, durante la noche del 25 de enero del 2015, caracterizada por hace mucho frío en el suburbio de Washington, la familia se disponía a dormir tras una noche de películas, cerveza y palomitas de maíz. Tras la velada, Christina intentaba dormir a su hijo mayor, momento en que sus gemelos de seis meses empezaron a llorar otra vez. Sin decir una palabra, la mujer bajó las escaleras, se dirigió a la cocina y sacó un cuchillo del lavavajillas. Cuando regresó a la habitación de los pequeños, cortó el cuello de los gemelos, posteriormente atacó a su hijo mayor y también le cortó la garganta.
Thomas se dio cuenta de lo que había pasado cuando su esposa apareció empapada de sangre. “¿Qué hiciste? No lo puedo creer”, le gritó Thomas mientras la mujer temblaba y lloraba. El hombre llegó al cuarto, encontró a los gemelos heridos y los trató con su botiquín médico, sin embargo, no se había dado cuenta que su hijo mayor también había sido atacado. “Llama al 911, Christina. Se mueren los niños”, le ordenó.
Thomas, al escuchar que la mujer no decía lo que le había pasado a sus hijos al 911, le arrebató el teléfono y le suplicó al operador que enviara una ambulancia. Les informo que los gemelos estaban sangrando por el cuello y que no sabía qué les había pasado. Las asistencias médicas llegaron muy rápido y llevaron a los niños al hospital. Entre los primeros auxilios de Thomas y de los médicos en el hospital, se logró parar las hemorragias y cerrar las heridas antes de que los tres niños se desangraran.
Tras quedar detenida, Christina declaró a la policía que “sabía que si mataba a todos los niños, la casa estaría tranquila para Thomas”. La mujer fue acusada de tres cargos de intento de asesinato contra sus hijos. La mujer se declaró culpable de cargos menores y fue sentenciada a 14 años y 6 meses de prisión.
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