Tres personas murieron atrapadas a 900 metros de profundidad en una mina de potasa de Cataluña por un desprendimiento ocurrido este jueves, informaron los bomberos.
"Hay tres personas atrapadas a unos 900 metros de profundidad y ahora mismo estamos valorando con la empresa cómo hacemos el rescate", señaló un portavoz de los bomberos catalanes.
Según los Mossos d’Esquadra, la Policía regional catalana, el accidente ocurrió poco antes de las nueve de la mañana locales, cuando hubo un desprendimiento en una galería de la mina, ubicada en la localidad de Súria, en la provincia de Barcelona.
La Policía regional desplegó unidades especializadas para participar en el rescate, entre ellos una unidad canina, mientras que los servicios de emergencias regionales precisaron, por su parte, que habían enviado al lugar dos helicópteros medicalizados y un equipo de psicólogos.
Asimismo, el Cuerpo de bomberos de la región autónoma, ubicada al noroeste de la Península Ibérica, señaló que envió nueve escuadrones especializados en rescate. Sin embargo, reportes de las autoridades locales señalan que los trabajadores habrían fallecido.
Esta mina de potasa, compuesto mineral que se emplea principalmente en la producción de fertilizantes, pertenece a ICL Iberia, y es considerada la más grande en su tipo en territorio catalán.
Este es el cuarto accidente con consecuencias fatales que ha ocurrido en la última década en esta planta. El primero de ellos ocurrió en 2013, cuando el techo de una galería aplastó a dos mineros, y los otros sucedieron en dos hechos distintos durante 2020, cada uno con un saldo de un muerto.
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