El pasado mes de marzo, una mujer cometió un acto atroz en el que le quitó la vida a su novio de una manera inimaginable, pues le mutiló el cuerpo mientras sostenían relaciones sexuales. Seis meses después de lo ocurrido, la asesina fue acusada de homicidio intencional en primer grado y de tercer grado por agresión sexual.
Los hechos ocurrieron en Winsconsin en Estados Unidos, y la mujer identificada como Taylor Schabusiness, originaria de del mismo estado confesó que cometió el crimen el pasado 23 de febrero, cuando mantenía relaciones
sexuales con su novio de 25 años.
De acuerdo con las investigaciones, los hechos señalan que Taylor lo decapitó, cortó una de sus extremidades y también la parte
íntima del joven, para luego dejar sus órganos dentro de una olla y un balde. Tiempo después autoridades locales encontraron a la joven, quien confesó el terrible hecho con el que le arrebató la vida a su pareja sentimental.
A su vez, la criminal detalló que tanto ella como su novio se encontraban fumando metanfetamina, para después ir a la
casa de la madre de Taylor y tener relaciones sexuales usando cadenas. Por su parte, medios locales señalaron que durante el acto sexual Schaubusiness se desmayó y ahí fue cuando empezó a estrangular a su novio.
En la horrible confesión, la Policía relató que mientras la joven relataba lo sucedido no podía parar de reír y agregó que Taylor cometió el asesinato con cuchillos que encontró dentro del domicilio, haciendo énfasis en que el cuchillo con dientes de sierra para cortar pan funcionada mucho mejor.
Oficiales dieron cuenta del hecho, gracias a que un hombre fue la persona que llamó a la Policía cuando encontró la cabeza
de un chico dentro de un balde, por lo que las autoridades de seguridad arribaron a una casa ubicada en Stony Brook en dicho estado.
En ese momento, la imputada estaba dormida y despertó al escuchar un portazo, y ahí fue donde se descubrieron los restos de su novio, pero fueron sus actitudes nerviosas las que la llevaron a convertirse en la principal sospechosa por ser la última persona con la que él estuvo, y además de haber encontrado manchas de sangre en la ropa.
Pero las sospechas se confirmaron cuando policías encontraron la olla dentro de la camioneta de Taylor, donde hallaron los restos humanos faltantes del sujeto.
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