Hace un año la jornada en Washington era caótica y tensa. La inminente caída de Donald Trump y las imágenes de hombres armados invadiendo el Capitolio le dieron la vuelta al mundo. Fue una noche oscura para la democracia estadounidense, pues hubo un saldo de cuatro muertos, más de 10 heridos y decenas de detenidos.
El reloj marcaba las 12:00 horas del día y un grupo de manifestantes republicanos se instalaron frente a la barricada policial ubicada a las afueras de la escalinata oeste del Capitolio, esto tras recorrer la Avenida Pensilvania. Por otro lado, las fuerzas del orden lanzaban gases lacrimógenos para dispersar a un nuevo contingente que pretendía ingresar por la cara este del recinto oficial.
“Nunca nos rendiremos. No se concede cuando hay un robo involucrado”, dijo un saliente Donald Trump poco antes del mediodía, además presionó al entonces vicepresidente Mike Pence para que rechazara los resultados del Colegio Electoral que daban como ganador a Joe Biden.
Alrededor de las 13:00 horas iniciaba la sesión conjunta en la Cámara de Representantes. Posteriormente, la oficina de Pence se posicionó al respecto y dijo que solamente se limitarían a cumplir su rol protocolario. Al interior del Capitolio los congresistas se fueron a cámaras separadas para comenzar a discutir la primera objeción proveniente del bando republicano.
(Foto: Reuters)
En la calle seguían los enfrentamientos y las barricadas metálicas fueron destruidas; los seguidores de Trump ingresaban al edificio. La policía, con el objetivo de evitar más confrontación, dieron pasos atrás. El Capitolio había sido vulnerado.
Hombres armados y caracterizados con los colores republicanos corrían por las escaleras. La policía lanzó alertas para que evacuaran el edificio. “Toma el Capitolio” y “Detengan el robo” fueron algunas consignas que se gritaban.
Ante el repliegue oficial, en los medios de comunicación circulaban fotografías de hombres escalando las paredes del Capitolio. Otros se subieron a los andamios para reventar los preparativos de la elección de Biden.
Una ventana rota sirvió para que los manifestantes comenzaran a ingresar al Capitolio. Muchos se movían libremente por la rotonda y comenzaron a vandalizar las estatuas de la puerta principal.
A las 14:10 horas, la sesión fue detenida luego de que el senador Chuck Grassley declarara: "Los manifestantes están en el edificio". Mike Pence fue evacuado entre gritos y empujones.
La policía le pidió a los senadores que se alejen de las puertas. En minutos, todos los congresistas fueron evacuados a un lugar seguro no revelado.
Trump, a través de su Twitter, dio un mensaje que no llamó a la calma: "Pence no tuvo el coraje de hacer lo que se debería para salvar al país". A pesar de que ya habían reportes de disparos, a las 14:35 la prensa ya reportaba una mujer herida al interior del edificio.
En redes sociales circuló cuando una mujer intenta romper una ventana y recibe un impacto. Tiempo después, volvió Trump a la carga y ahora cambió el discurso: "Por favor apoyen a la policía. Ellos están verdaderamente del lado de nuestro país".
Las fuerzas de seguridad colocaron barricadas en las puertas de las cámaras y los oficiales estaban armados. En los pasillos seguía el caos. Algunos manifestantes portaban banderas confederadas, otros seguían robando el mobiliario.
La mujer herida fue evacuada pero murió en el hospital. Los policías realizaron algunas detenciones pero la mayoría circulaba libre y salieron sin problemas.
(Foto: AFP)
"Estas son las cosas y eventos que suceden cuando una victoria electoral sagrada es tan poco ceremoniosa", escribió Trump legitimando los hechos.
A las 17:00 horas los uniformados lograron sacar al grueso de la manifestación. Se estima que fueron alrededor de 50 detenciones. Una hora después comenzó el toque de queda decretado por las autoridades de Washington, por lo que desde un rato antes el grueso de los manifestantes se había retirado de los alrededores del Capitolio.
El Congreso volvió para certificar los resultados del Colegio Electoral, una sesión que se prolongó hasta el otro día debido a los reclamos de un sector republicano. Trump había perdido y EU tenía nuevo presidente.
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