Al este de la República Democrática del Congo se encuentra el volcán Nyiragongo. Ubicado en la ciudad de Goma, este monte entró en erupción ayer, 22 de mayo. De acuerdo con un corresponsal de AFP, el cielo se tiño de un tono rojizo y el olor a azufre alertó a la población que se encontraba en la zona, misma que ya está familiarizada con los efectos que la naturaleza produce.
El gobernador de Kivu del Norte confirmó la erupción del volcán, misma que ocurrió a las 19:00 horas. Mientras aseguró que los servicios de protección civil ya estaban brindando recomendaciones a la población, solicitó que las personas mantuvieran la calma. Posteriormente, el gobierno ordenó la evacuación como una de las medidas urgentes que se implementaron para salvaguardar a la población.
Las magnitudes del desastre
De acuerdo con BBC, miles de personas tuvieron que huir de sus hogares en la región, lo que comenzó a aumentar la preocupación respecto a las posibles víctimas que podrían resultar de este fenómeno natural. Se calcula que más de tres mil personas llegaron durante la noche a Rubavu, una ciudad ruandesa cerca de la frontera con la República Democrática del Congo. La recepción de víctimas en esta ciudad se realizó de manera pacífica y organizada por parte de las autoridades responsables.
Además de la lava que engullía todo a su paso, incluida la carretera, la red eléctrica sufrió apagones en grandes áreas. Después de que avanzaron las horas y la lava disminuyó, algunos habitantes de la zona pudieron regresar a sus hogares para evaluar los daños. Afortunadamente, gran parte de la ciudad no fue derribada por la lava, misma que se detuvo alrededor de las 4 a.m. en Buhene, una localidad situada cerca de Goma.
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La incertidumbre continúa
Hasta el momento se desconoce si las autoridades han realizado un registro oficial de víctimas o de casas dañadas por la erupción, se estima que la cifra de personas fallecidas es mayor a las 13 que reportaron en el conteo inicial. Sin embargo, de acuerdo con las cifras del fenómeno ocurrido en 2002, la erupción del mismo volcán cobró la vida de 250 personas. Los habitantes cuyas casas quedaron destruidas esperarán ser reubicados.
AFP registró los hechos tanto en fotografía como en video. En dichos materiales se demuestra cómo la lava llegó al aeropuerto de la ciudad y continuaba incendiando todo a su paso, mientras las personas huían lo más rápido posible para alejarse del olor a azufre y la destrucción. A pesar de que la lava se detuvo, la incertidumbre en la población continúa.
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