Ante el aumento en la llegada de migrantes a Estados Unidos, el gobierno de la nación busca estrategias para combatir el problema de raíz y reducir el flujo de personas indocumentadas que arriban a la frontera. Además de ayudar en el combate a la corrupción, la administración de Joe Biden podría enviar dinero e incluso vacunas a varios países de Centroamérica para que los habitantes de esa región no se vean obligados a partir en búsqueda del sueño americano.
El apoyo monetario se otorgaría a través de un programa de transferencias en efectivo que estaría sujeto a varias condiciones, como lo informó Roberta Jacobson, coordinadora de la Casa Blanca para la frontera sur, en una entrevista con Reuters.
De acuerdo con sus declaraciones, los apoyos económicos irían dirigidos a personas que viven en la región del Triángulo Norte, es decir, Guatemala, Honduras y El Salvador. Sin embargo, no proporcionó más información sobre como operaría la iniciativa.
"Lo único que puedo prometer es que el gobierno de Estados Unidos no va a repartir dinero o cheques a la gente" señaló la funcionaria de alto rango.
Jacobson también indicó que el presidente considera que las vacunas contra Covid-19 podrían fortalecer las economías de esos países, aunque no definió si se les dará prioridad para el envío de los sueros que ayuden a disminuir los números de contagios.
Este anuncio se da en un punto donde se ha alcanzado un récord respecto al cruce de migrantes en la frontera entre México y Estados Unidos. Tan sólo en el mes de marzo, se registró el ingreso ilegal de 172 mil personas, de los cuales, el 10% eran menores de edad. Ésta fue la cifra más alta desde marzo de 2001.
Después del informe, se dio a conocer que Jacobson dejará su cargo a finales de abril, luego de que se cumplan los 100 días de mandato de Biden. La funcionaria aseguró que esto no se debía al aumento en la llegada de indocumentados, sino que su compromiso con el gobierno demócrata actual siempre fue definido como "temporal".
A partir de esa fecha, la vicepresidenta Kamala Harris será la encargada de frenar la migración irregular desde Centroamérica.
DFC