Gracias a la observaciones de un grupo de astrónomos de Japón y Taiwan se ha logrado predecir la existencia de una supernova extrema de estrella supermasiva en el universo, la cual posiblemente sea la progenitora de agujeros negros supermasivos.
Los datos de esta observación han sido publicados en 'Monthly Notices of the Royal Astronomical Society', donde se sugiere que esta supernova podría ser observada por el Telescopio Espacial James Webb (JWST) que se lanzará a finales de este año.
Según datos previos otorgados por misiones anteriores se ha logrado demostrar la existencia de un agujero negro supermasivo en el centro de cada galaxia, pero de momento se desconoce cuál podía ser el origen de estos agujeros negros supermasivos, siendo un total misterio hoy en día.
Teoría apunta a muerte de galaxias como su origen
Si bien se cuenta con poca información sobre este tema, su estudio es de suma importancia para la astrofísica moderna, pues existe la teoría principal que sugiere que las semillas de los agujeros negros supermasivos se formaron después de la muerte de las primeras estrellas masivas en el universo temprano, y luego estas semillas continuaron acumulando el gas circundante y finalmente se formaron hoy en día en agujeros negros supermasivos.
Pese a ser la teoría más popular, ha sido cuestionada debido a que las estrellas más masivas observadas en el universo cuentan con cien o doscientas masas solares, pero no cuentan con la mayor eficiencia de acreción para formar los agujeros negros supermasivos que se observan en la actualidad.
En este sentido es probable que sean las progenitoras de los agujeros negros supermasivos en las galaxias, debido a que cuanto más masiva es la semilla del agujero negro, más eficiente es es tragar la materia circundante.
Cabe señalar que los agujeros negros no necesitan mantener una alta tasa de acreción para crecer rápidamente, pero no existe forma de demostrar que alguna vez existieron estas estrellas masivas.
Por lo que es un nuevo desafío de observación debido a que la mayoría de estas estrellas supermasivas colapsarán en agujeros negros, por ello la próxima misión JWST tiene la oportunidad de observar esta supernova y proporcionar datos que puedan confirmar el origen del agujero negro supermasivo en la galaxia.
SSB