El 16 de enero, la iglesia católica celebra el santo de San Marcelo, un centurión de la Legio VII Gemina que se convirtió al cristianismo y murió como mártir.
En el siglo IV, el Papa Marcelo I estuvo al frente de la Iglesia católica durante apenas un año, según lo que ha quedado registrado en la tradición católica. Aunque su mandato fue breve, el santo tuvo que hacer frente a una época difícil, tras las numerosas persecuciones de las que fueron objeto los cristianos en su época y la muerte del Papa Marcelino, por lo que su papel como Pontífice fue clave.
Marcelo se encargó de reorganizar las estructuras y jerarquías de la Iglesia, así como de abrir las puertas a la reconciliación de aquellos cristianos a los que tradicionalmente se ha llamado lapsis, un término con el que se hace alusión a los primeros creyentes que traicionaron su fe por las presiones de los romanos durante las persecuciones.
Tras el perdón a esta parte de la comunidad católica, el santo se ve abocado al destierro por órdenes del emperador Majencio y muere en su confinamiento, sin poder encargarse más de sus labores como Papa.
Otros santos que también se recuerdan son:
Además de recordar a San Marcelo, Ia Iglesia católica rinde homenaje a:
- San Berardo
- San Honorato
- San Jacobo obispo de Tarantasia
- San Otón
- San Pedro
- San Tiziano
- Santa Juana
