Un hombre británico que abusó de casi 200 niños, fue violado y asesinado en la cárcel presuntamente por su compañero de celda, quien tenía por objetivo, hacerle sentir lo que vivieron sus víctimas.
De acuerdo con información emitida por Daily Mail, en el juicio en el Tribunal de la Corona de Hull en Inglaterra, se dio a conocer que dicho ataque fue “cuidadosamente planeado y ejecutado”.
Dicho juicio fue realizado el pasado 18 de noviembre, en donde “el peor pedófilo” del Reino Unido, fue acusado por violación y posteriormente puesto en prisión, en donde murió.
Asesinan al "peor pedófilo" de Reino Unido
Presuntamente dicho acto fue llevado a cabo por Paul Fitzgerarld, quien también fue encarcelado por cometer delitos sexuales desde 2009; violó usando un utensilio de cocina, un bolígrafo por la nariz hasta llegar al cerebro y luego realizó estrangulamiento con un cable eléctrico.
Te podría interesar
“El peor pedófilo” de Reino Unido, presentó signos de violencia, tales como golpes en la cara y riñones, así como una herida de puñal en el cuello; posteriormente las autoridades llegaron a la celda donde encontraron a Fitzgerald cerca del hombre que abusó de casi 200 menores.
"Creo que lo maté, está muerto", dijo Fitzgerald a los vigilantes de la cárcel, según señaló durante el juicio el fiscal Alistair Neil Macdonald.
Su asesino sufre de problemas mentales
Luego del asesinato, Fitzgerarld admirió ante un especialista en salud mental que incluso quería cocinar los restos de Huckle y que “se divirtió mucho” durante el ataque; la autopsia indicó que el hombre murió a causa de estrangulamiento.
"Este fue un ataque cuidadosamente planeado y ejecutado, en el transcurso del cual el señor Huckle fue sometido a una agresión prolongada y diseñada también para humillarlo y degradarlo", declaró Macdonald.
Cabe señalar que Fitzgerald se declaró inocente del cargo de asesinato y en su defensa alega que se trata de un homicidio con responsabilidad disminuida, sin embargo, de acuerdo con la psiquiatra asignada en el caso, declaró que el acusado sufría de psicopatía y transtornos de personalidad mixta y de identidad de género.