La limpieza del hogar es un factor clave para la prevención de enfermedades. El polvo y los gérmenes que pueden alojarse en algunos rincones de la casa, pueden producir desde tos, congestión y alergia, hasta cuadros virales en los huéspedes.
Es por eso que se vuelve necesario tener una rutina de limpieza frecuente en el hogar, sobre todo en la cocina y en el baño. Estos espacios son muy importantes para la vida de los huéspedes de la casa. Mientras uno es el indicado para manipular los alimentos, el otro acumula mucha humedad por ser el rincón donde se produce la higiene corporal.
Lo cierto es que el baño es uno de los espacios que más limpieza requiere, ya que puede ser nido de bacterias, cucarachas o moho. Una de las zonas que muchas personas se olvidan de limpiar, sin dudas, es la bañera y los azulejos. Limpiar estas superficies puede ser tedioso y puede demorar bastante tiempo.
La espuma de afeitar como aliada de la escoba
Si bien existen productos específicos para la limpieza de cada tipo de superficie, también existen opciones caseras que podemos implementar para ahorrarnos tiempo y dinero. Es así como en muchos casos se puede acudir al ácido cítrico del limón, a la sal, al vinagre blanco o al bicarbonato de sodio.
Pero hay un elemento más que se puede aplicar para limpiar y seguramente muchas personas desconocen: la espuma de afeitar. Este producto que sirve para retirar con facilidad el vello del rostro y otras partes del cuerpo, también resulta ser un excelente aliado de la escoba.
La textura del producto y su agradable aroma, resultan favorecedores para la limpieza de superficies como juntas, azulejos y bañeras (o duchas). Es por eso que puedes aplicar una generosa cantidad de esta sustancia en la escoba y llegar a los sitios más incómodos del baño, para dejarlo reluciente y libre de suciedades.
Deja actuar la espuma en las superficies al menos 30 minutos y luego enjuaga con agua. Cabe mencionar que para que este método resulte realmente efectivo, debes utilizar una escoba que no haya tenido ningún tipo de uso, es decir, que esté nueva y limpia.