Un trabajo de manicura perfecto no solo consistirá en la aplicación del esmaltado y los dibujos que podemos hacer en nuestra uñas, ya que también entrará en juego el cuidado y tipo de secado, evitando así que el resultado quede desprolijo. Siguiendo esta línea, cualquier mujer que se haga las uñas deberá conocer el truco perfecto del secado veloz. Y si no lo sabés, seguí leyendo así lo aprendés.
Todo tipo de manicura requiere de un cuidado especial al momento posterior, fundamentalmente en el secado. Es que se pueden tardar horas en secar bien y la probabilidad de que se seque sin que se haga feo o se lastime es mínima. Pero hoy te contaremos cómo acelerar el procedimiento y salir a la calle con tus uñas espléndidas.
Es que de acuerdo a especialistas, el esmalte es un polímero, esto significa que se forma por una reacción química. Por lo tanto, cuando te pintas las uñas, se empiezan a evaporar los solventes en el aire y una vez que se evaporan por completo, el esmalte está totalmente seco. Y ante esto, la mejor opción para el secado es agua helada, debido a que la combinación entre el aire natural y el agua fría será esencial.
Mientras que para que la manicura de la mujer quede perfecta y se rompa menos de lo normal, hay un par de reglas a seguir. La primera consiste en que todas las capas que apliques sean lo más ligeras posible. La segunda está centrada en que si el esmalte se pasa sobre la piel, lo corrijas antes de que se seque para evitar que se empiece a levantar. Y en tercer lugar, esperar a que cada capa seque bien antes de aplicar la siguiente.
Luego, para acelerar el proceso de secado entre capas, podrás sumergir las uñas en agua. En consecuencia, una vez que te hayas pintado, esperarás unos minutos para que sequen al aire y después sumergirás tus uñas durante 2 minutos en el agua helada. Es muy importante que evites que tus dedos choquen contra los hielos para que el manicura no se dañe.