TELENOVELAS

La telenovela mexicana que estaba maldita: reunió a Sergio Goyri, Eduardo Yáñez y Erika Buenfil

El melodrama adquirió tintes de magia y misterio lo que alimentó el interés por no perderse ni un solo capítulo

ESPECTÁCULOS

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Elenco de la telenovela 'El Maleficio' producida y estelarizada por Ernesto Alonso Foto: Especial

En 1983 el género de las telenovelas dio un giro radical con una de sus más grandes producciones en cuanto a elenco y trama se refiere, por primera ocasión en un producto de Televisa se abordó el tema del espiritismo, ocultismo y el terror psicológico y por poco les cancelan el proyecto, de no ser porque el resultado fue un éxito a gran escala.

Nos referimos a la telenovela ‘El Maleficio’ estelarizada y producida por Ernesto Alonso, Jacqueline Andere y Carlos Bracho, con un guion de la escritora Fernanda Villeli, bajo la dirección de Raúl Araiza y un elenco de soporte de lo mejor que existía en aquel momento, Norma Herrera (mamá de los hermanos Araiza), María Sorté, Carmen Montejo y Carlos Bracho, además de los jóvenes actores, Erika Buenfil, Sergio Goyri y Eduardo Yáñez.

El melodrama con tintes terroríficos, fue la primera en su género producida y difundida en televisión abierta de México, y a pesar de que ya han pasado 38 años desde su estreno, sigue causando polémica y dividiendo opiniones por la historia que encumbró a Ernesto Alonso (conocido más tarde como el Sr. Telenovela), a la cima del éxito con un personaje entrañable y a la vez muy impactante.

En otros momentos de la televisión, se proyectó ‘El extraño retorno de Diana Salazar’ en Televisa y ‘La Chacala’ en Tv Azteca, melodramas con temática similar.

La historia sobre ‘El Maleficio’ trata sobre una mujer de nombre Beatriz, respetable viuda que desde la muerte de su esposo ha vivido dedicada a la crianza de sus hijos, Vicky y Juanito, junto a su suegra Doña Emilia. Beatriz conoce al poderoso millonario Enrique de Martino (Alonso), quien la deslumbra por su elegancia y acepta casarse con él.

Lo que no sabe Beatriz es que Enrique es en realidad un hechicero que ha hecho su fortuna gracias a la brujería y a las artes ocultas, y constantemente acude a brujos que viven en Oaxaca, una de ellas (Teodora) le rinde culto a un demonio llamado ‘Bael’, que se manifiesta en un cuadro que Enrique guarda dentro de su oficina.

La vida de Beatriz y sus hijos se altera al mudarse a la mansión de Martino, donde entran en contacto con los extraños hijos de Enrique: el perverso Jorge, el dulce pero confuso César y el enigmático Raúl. Beatriz descubre que su esposo puede ser muy ruin y que él empujó al alcoholismo a su primera esposa Nora. Mientras tanto, Juanito tiene poderes paranormales que se magnifican con la atmósfera maligna que rodea a su padrastro.

De Martino además forma parte de una fraternidad radicada en Nueva York, misma que dentro de la trama está por elegir a su sucesor que debía ser tanto o más despiadado que el propio líder de la fraternidad, un tipo italiano llamado Luiggi.

Enrique al notar los eventos que suceden a su alrededor y ver en peligro la posible sucesión y ensanchamiento de su poder, decide escoger a Juanito (Armando Araiza) como su sucesor, desencadenando una serie de eventos paranormales.

La telenovela a pesar de los extraño de su historia fue un éxito rotundo, todas las noches el público mexicano nos e perdía los enredos y acciones que generaba el personaje de Ernesto Alonso a lo largo de 325 episodios transmitidos entre el 7 de febrero de 1983 y el 27 de abril de 1984, un récord para una producción mexicana de ese estilo.

Datos y curiosidades

La telenovela fue censurada en Chile, comenzó su transmisión a través de la señal del canal 13 de la Universidad Católica de Chile a finales de 1983, pero sólo se emitieron dos capítulos, la razón por la que no se permitió su transmisión fue porque dentro de la historia se hacía mención sobre la realización de negocios en Chile, situación que no era permitida por la dictadura que gobernaba en aquel entonces con Augusto Pinochet; con el paso del tiempo la telenovela fue finalmente transmitida integra.

El personaje de Ernesto Alonso le rendía culto a un demonio llamado ‘Bael’, cuando se ponía en contacto con él los ojos se encendían, lo que generaba una atmósfera macabra en el set de grabación, los propios técnicos aseguraban que el cuadro era ‘incolgable’ ya que en cuanto lo colgaban en la pared se caía al poco tiempo.

Además, dentro del set de grabación comenzaron a suscitarse cosas extrañas, constantemente se apagaban las luces, se rompían cosas, se llegaron a ver incluso siluetas de personas que no eran parte de la producción, además de la supuesta desaparición de objetos.

Los actores del elenco también tuvieron que tomar previsiones, varios de ellos usaban escapularios, medallas y crucifijos como protección ante los eventos paranormales.

En tanto, las actrices Patricia Reyes Spíndola y Malena Doria también llevaron a cabo ritos para mantenerse ‘protegidas’, la primera acudió con una cartomanciana para ‘prevenir’ eventualidades mientras que la segunda llevó a cabo una limpia en su casa porque se movían cosas y se escuchaban ruidos extraños.

Finalmente y no menos importante, la telenovela tiene una ‘maldición’ desde que se realizó nunca ha vuelto a tener éxito o se ha concretado un remake de la historia, el último intento fue en 2018 con el proyecto de ‘fábrica de sueños’ en el que la telenovela estaba contemplada para su realización, pero no se llevó a cabo el proyecto, incluso se menciona que Sergio Goyri estaba listo para interpretar a De Martino, pero los comentarios sobre Yalitza Aparicio enterraron ese ‘sueño’.

El éxito de 'EL Maleficio' trascendió más allá de la pantalla chica y pasó al cine en 1986 con la película 'El Maleficio II: los enviados del infierno' estelarizada por  Ernesto Alonso, Lucía Méndez y Armando Araiza, sin embargo, no tuvo el éxito arrollador de la telenovela y mucho menos, tanta proyección a nivel internacional.