RIGO TOVAR

Rigo Tovar ciego, pobre y alcohólico; así fue el triste final del "Jim Morrison mexicano"

Invirtió millones de pesos para contrarrestar los efectos de su enfermedad y, a pesar de los tratamientos médicos, el cantante se hundió en una fuerte depresión

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Cuando el artista consolidó su carrera musical integró instrumentos eléctricos de la época.Foto: Twitter @rigo_tovar_viveCréditos: Instagram

El 27 de marzo se cumplen 16 años de la muerte de Rigoberto Tovar García, mejor conocido como “Rigo Tovar”. El cantante y músico mexicano se convirtió en un ídolo de la música regional por temas como “La Sirenita”.

El intérprete de “Perdóname mi amor por ser tan guapo” murió de un paro cardiorrespiratorio en el 2005, antes de su cumpleaños número 59.

Es conocido por la mezcla entre géneros como la cumbia, la balada y el bolero

Rigo nació el 29 de marzo de 1946 en Matamoros, Tamaulipas. Tuvo nueve hermanos y su padre formaba parte de la banda municipal de Matamoros.

Cuando el artista consolidó su carrera musical integró instrumentos eléctricos de la época, lo que representó innovaciones significativas para lo que después se convirtió en la cumbia mexicana como género y la tecnocumbia.

Luego de perder a su madre en 1974 y a su hermano y representante, Everardo Tovar, durante el sismo de 1985, el cantante se involucró en problemas de exceso de alcohol y drogas. Debido a esto, se le conocía como “El Jim Morrison mexicano”.

Después de una serie de excesos, la estrella perdió fama y dinero. Se enfermó de una rinitis pigmentosa que le causó ceguera, lo que le impidió realizar varias actividades. Invirtió millones de pesos para contrarrestar los efectos de su enfermedad y, a pesar de los tratamientos médicos, el cantante se hundió en una fuerte depresión.

Además de esto, tuvo vitíligo y diabetes

Su muerte fue controversial porque, entre otras cosas, varias mujeres asistieron a reclamar una parte de su herencia. El cantante tuvo 10 hijos con diferentes mujeres y, en algún momento, se llegó a pensar que el total de descendientes era 16.

Antes de morir, pidió que sus cenizas recorrieran todo el país y que después fueran esparcidas en una playa de Matamoros. Su muerte significó un duro golpe para la música tropical en México.

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