La gran actriz del cine de oro mexicano fue una mujer con una gran personalidad, transgresora para su tiempo, una mujer empoderada que rompió muchos tabúes y mitos sobre el "cómo ser" una mujer en aquella época, en el que el machismo; al igual que hoy, estaba mucho más tolerado.
En un ambiente machista y conservador, algunos temas eran muy difíciles de abordar, como el aborto, la homosexualidad o el divorcio", por lo que además la forma de "divulgar" esas temáticas, vieron una alternativa en algunas películas dentro del cine de oro mexicano, y qué mejor que ella para interpretar papeles fuertes como esos.
Amok
Amok es una película mexicana de drama romántico estrenada en 1944, dirigida por Antonio Momplet y protagonizada por María Félix y Julián Soler. La película está basada en la novela Amok escrita por el austriaco Stefan Zweig en la que aborda el aún polémico tema sobre el aborto, retratando la importancia de ser legal para evitar muertes de las mujeres que hayan tomado la decisión de interrumpir su embarazo.
En ésta cinta La Doña interpreta el personaje de la señora Belmont, una misteriosa mujer que resguarda un increíble parecido con una pareja del doctor que lo habría dejado en la ruina, en ambos papeles, luce una rubia cabellera prácticamente durante todo el metraje, a excepción de las últimas escenas. Amok fue la única película de su carrera donde apareció con su melena rubia al más puro estilo de divas internacionales como Marilyn Monroe.
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¿Racismo?
La enigmática actriz evitó a toda costa lucir nuevamente su cabellera rubia, se dice que fue debido a que sus hermanas tenía el cabello de ese color, por lo que en su afán de ser única e inigualable, para seguir en contracorriente, jamás volvió a teñirse el cabello, además de que las técnicas de decoloración eran bastante agresivas y aunque estaba de moda dicho tono, ella siempre optó por ser fiel a su personalidad.
Además, el color sólida en el cabello era una tendencia, por lo que, orgullosa de ser mexicana, pese a tener raíces vascas, la actriz decidió pulir su personalidad y seguir siendo un ícono original sin necesidad de tintes ni nada artificial en su persona, razón que hasta el día de su muerte se conservó con su mismo tono, además de que pocas veces se dejó ver con canas.
Con información de Vogue
avh