Relación bilateral

Implicaciones para México durante una segunda administración de Donald Trump

De acuerdo a información proporcionada por Public and Corporate Solutions LATAM

Implicaciones para México durante una segunda administración de Donald Trump
Foto: Facebook Donald J. Trump

Tras los resultados electorales del 5 de noviembre, el 20 de enero de 2025, Donald Trump iniciará un segundo mandato que tendrá varias implicaciones para México, abarcando áreas de la relación bilateral como migración, comercio y seguridad, entre otras.

A continuación, se presentan algunos de estos posibles efectos:

1. Efectos Inmediatos

Presiones sobre el tipo de cambio: Las políticas de Trump suelen generar incertidumbre en los mercados internacionales, lo que lleva a la volatilidad en el peso mexicano. La confirmación del triunfo de Trump puede llevar el tipo de cambio por encima de los 21 pesos por dólar en el corto plazo, tal como se vio las primeras horas del miércoles. De sostenerse la tendencia, esto podría aumentar el costo de importaciones para las empresas mexicanas, especialmente en equipos especializados, y afectar su planificación financiera y rentabilidad.

Riesgo de desaceleración económica: La incertidumbre económica y los gastos relacionados con aranceles podrían debilitar la economía de México. Un menor crecimiento económico impactaría la demanda de bienes y servicios, así como los presupuestos públicos, limitando posiblemente la inversión del gobierno en infraestructura crítica.

Foto: Public and Corporate Solutions LATAM

2. Políticas Migratorias

Mayor control migratorio: La primera administración de Trump se caracterizó por políticas para controlar la migración centroamericana dentro de las fronteras mexicanas, particularmente el programa “Quédate en México”, impuesto bajo la amenaza de imponer aranceles si México no reforzaba las fronteras. Un segundo mandato de Trump podría implicar un retorno o intensificación de estas demandas, lo cual fue una amenaza constante a lo largo de la campaña presidencial.

Aumento en la seguridad fronteriza: Trump podría buscar una mayor presencia de fuerzas de seguridad en la frontera de EE.UU., lo que podría presionar a México para cooperar en la gestión de los flujos migratorios, posiblemente expandiendo los centros de detención de migrantes y otros mecanismos de control en su frontera sur.

Deportaciones masivas de migrantes ilegales: Durante su campaña, Trump prometió iniciar una política de deportaciones masivas de inmigrantes ilegales, los cuales previsiblemente serían llevados al lado mexicano de la frontera. Si bien es poco probable una deportación de la totalidad o un alto porcentaje de las personas migrantes ilegales que viven en EE.UU., una deportación de decenas o cientos de miles de migrantes a México significaría una crisis humanitaria y un problema mayúsculo para nuestro país en cuanto a su impacto económico, sanitario y de seguridad.

3. Comercio y Economía

Posibles tensiones comerciales: Aunque el T-MEC (Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá) fue negociado en la parte final bajo la administración de Trump, él frecuentemente amenazaba con imponer aranceles a las importaciones mexicanas como medio de coerción, particularmente en cuanto a sus políticas de migración. Es posible que insista en ese tema en su segundo mandato.

Nuevos aranceles: Trump ha propuesto un arancel universal del 10% en todas las importaciones extranjeras, lo que incluiría una amplia gama de productos de México, como electrónicos, maquinaria y bienes de consumo. Esta medida busca promover la manufactura local, pero podría afectar significativamente las exportaciones mexicanas.

Impacto en la cadena de suministro: La política de “America First” podría impulsar a las empresas estadounidenses a trasladar la fabricación de regreso a EE.UU., lo cual afectaría las cadenas de suministro que involucran al sector manufacturero en México y podría reducir oportunidades laborales en el país. Una política de aranceles generaría presión sobre los costos en la propia industria manufacturera de Estados Unidos. Además, si Trump desea continuar la guerra comercial con China, necesitará un aliado comercial que suministre lo necesario para su industria¹. Una postura más dura en seguridad fronteriza podría ralentizar las cadenas de suministro transfronterizas, afectando el envío oportuno de productos. Los retrasos podrían interrumpir las operaciones y aumentar los costos de productos finales y/o materiales sensibles al tiempo.

Continuidad del T-MEC: La revisión prevista del T-MEC que iniciará a medidados de 2026 puede significar en el mejor de los casos, la exigencia de mayores garantías sobre temas como la reforma judicial, energía, y el comercio de productos agrícolas; en el peor de los casos podría ser el fin del Tratado. Ya no existe como lo hubo a mediados de los años 90, el consenso de la élite gobernante acerca de la conveniencia de seguir con el acuerdo comercial; ambos partidos responden a una base electoral que se ha visto afectada por la pérdida de empleos en manufactura que se han movido fuera de EEUU.

En suma, las industrias mexicanas, particularmente aquellas altamente integradas en las cadenas de suministro de EE. UU., deben permanecer atentas a la política comercial de la siguiente administración de Trump. De manera general, se advierten posibles situaciones transversales de impacto para todas las industrias, tales como:

Aranceles generales en importaciones: Si Trump implementa un arancel general en todas las importaciones, los productos e insumos provenientes de México podrían enfrentar mayores costos, lo cual complicaría el comercio transfronterizo y podría aumentar los precios en ambos países.

Estándares de cumplimiento ambiental más estrictos: La administración de Trump podría exigir estándares más altos de cumplimiento ambiental o regulatorio para las importaciones mexicanas o para proyectos transfronterizos. Esto aumentaría los costos operativos y podría ralentizar el desarrollo de proyectos, productos e infraestructura.

Reducción de la inversión extranjera: Las políticas comerciales impredecibles de Trump y la posible renegociación del T-MEC podrían hacer de México un destino de inversión menos atractivo. La incertidumbre en torno a aranceles o nuevos términos comerciales podría disuadir a empresas estadounidenses de invertir en proyectos en México, afectando el crecimiento y modernización de nuestra economía.

Disrupciones en los cruces fronterizos: Mayores controles fronterizos o aranceles podrían interrumpir el flujo de productos, insumos, componentes y equipos entre EE.UU. y México. Las demoras o mayores costos de transporte podrían afectar proyectos dependientes de entregas puntuales o con requerimientos especiales.

Impacto en Sectores Estratégicos

Industria Automotriz:

Aranceles en vehículos y componentes: Trump ha amenazado con imponer aranceles de hasta el 200% en autos fabricados en México. Esto encarecería los vehículos y componentes mexicanos en EE.UU., disminuyendo su competitividad y afectando la demanda de exportaciones.

Renegociación del T-MEC: Trump ha mencionado su intención de revisar los requisitos de contenido regional en el sector automotriz. Cambios en estas normas podrían obligar a las empresas mexicanas a aumentar el contenido de insumos estadounidenses, lo cual podría incrementar los costos de producción.

Disrupciones en la cadena de suministro: Mayores controles en la frontera o cambios en la política comercial podrían ralentizar el flujo de componentes y vehículos entre EE.UU. y México, afectando las líneas de ensamblaje y aumentando los costos operativos.

Incentivos para la producción en EE.UU.: Trump podría incentivar la producción automotriz dentro de EE.UU., lo cual afectaría la demanda de vehículos ensamblados en México. Esto podría llevar a una reubicación de plantas y una disminución en las inversiones futuras en la industria automotriz mexicana.

Costos de transporte y demoras en la frontera: Medidas de seguridad fronteriza más estrictas o mayores revisiones en los cruces podrían aumentar los tiempos de tránsito y los costos de transporte para las exportaciones automotrices mexicanas. Esto afectaría la eficiencia de la cadena de suministro y podría impactar los tiempos de entrega.

Incremento en costos de insumos: La implementación de aranceles o la promoción de contenido estadounidense en vehículos podría aumentar los costos de insumos en México, haciendo que los vehículos fabricados en el país sean menos competitivos frente a sus contrapartes en EE.UU.

Industria farmacéutica

Incremento de aranceles en productos farmacéuticos: Trump ha mostrado inclinación por imponer aranceles a las importaciones para proteger las industrias estadounidenses, lo que se convertiría en un riesgo para México si Trump prioriza la producción nacional de medicamentos.

Revisión del T-MEC / Sunset Review (2026): Trump ha expresado interés en renegociar el T-MEC, lo cual podría traer cambios en términos de exportaciones farmacéuticas, derechos de propiedad intelectual o normas de calidad. La inclusión en la revisión de temas relativos a precios y cadena de suministro pudieran afectar principalmente a las empresas de dispositivos médicos establecidas en México debido a los aranceles propuestos. Otro aspecto importante será el cumplimiento de lo establecido en el Tratado relativo al respeto a la propiedad intelectual y la vigencia de patentes, así como el acceso temprano a medicamentos genéricos en acatamiento al marco legal internacional.

Cumplimiento regulatorio más estricto: EE.UU. podría imponer requisitos regulatorios más estrictos en las importaciones, exigiendo estándares o certificaciones adicionales en calidad, seguridad y eficacia. Esto aumentaría los costos de cumplimiento para los productores mexicanos y podría requerir cambios en los procesos de manufactura.

Mayores controles fronterizos: Una postura más dura en seguridad fronteriza podría obstruir las cadenas de suministro transfronterizas, afectando el envío oportuno de productos farmacéuticos, generando retrasos y afectando el transporte de materiales sensibles al tiempo.

Desacoplamiento de la cadena de suministro: Las políticas proteccionistas de Trump para la manufactura nacional, podrían incentivar la reubicación de las cadenas de suministro farmacéuticas, reduciendo su dependencia en importaciones. Esto podría llevar a las empresas estadounidenses a buscar proveedores dentro de EE.UU., disminuyendo la demanda de productos farmacéuticos y materias primas fabricadas en México.

Dependencia en APIs (Ingredientes Farmacéuticos Activos por sus siglas en inglés) importados: Para las empresas farmacéuticas mexicanas que importan APIs de otros países, particularmente de China, si Trump intensifica los aranceles o restricciones contra dicho país, se podría interrumpir la cadena de suministro para las empresas mexicanas dependientes de estos componentes, afectando costos de producción y disponibilidad de medicamentos.

Sector energético

Aranceles en productos y equipos energéticos: Trump podría imponer aranceles a las exportaciones de energía de México, como petróleo y gas, o a equipos relacionados con energía que se importan a EE.UU. Esto podría impactar la rentabilidad de las empresas energéticas mexicanas que dependen del mercado estadounidense e incrementar los costos de infraestructura energética importada de EE.UU.

Aumento de la producción de petróleo y gas en EE.UU.: Las políticas de “America First” de Trump podrían favorecer la independencia energética de EE.UU. y el desarrollo de recursos domésticos. Esto podría hacer que las exportaciones energéticas mexicanas sean menos competitivas, especialmente si los incentivos en EE.UU. reducen la demanda de importaciones desde México.

Reducción de la demanda de petróleo crudo mexicano: El apoyo de Trump a los combustibles fósiles podría fomentar una mayor producción en EE.UU., lo que podría reducir la necesidad de importar crudo mexicano, afectando los ingresos de PEMEX.

Renegociación del T-MEC: La renegociación del T-MEC, podría traer cambios al capítulo energético que afecten las disposiciones sobre inversión y comercio en energía. Las revisiones podrían afectar el acceso al mercado, los estándares ambientales o la alineación regulatoria, creando más incertidumbre para los proyectos energéticos mexicanos que dependen de inversiones y tecnología de EE.UU.

Impacto en inversiones de energía renovable: La administración de Trump ha priorizado históricamente los combustibles fósiles sobre las energías renovables. La reducción de interés en colaboración transfronteriza o inversiones en energías renovables podría parar el crecimiento de proyectos de energía renovable en México, afectando el avance hacia la diversificación y sostenibilidad energética.

Aumento en los costos de transporte: Si las exportaciones energéticas enfrentan retrasos o tarifas adicionales en la frontera, las empresas energéticas mexicanas podrían ver un incremento en los costos de transporte y cumplimiento, afectando la rentabilidad de proyectos y potencialmente aumentando los precios al consumidor.

Presión sobre políticas de seguridad en México: Trump ha sugerido tomar medidas más fuertes para combatir a los cárteles, incluyendo la posibilidad de catalogarlos como organizaciones terroristas. Esto podría tensar las relaciones EE.UU.-México y complicar los proyectos energéticos transfronterizos, especialmente en regiones afectadas por el crimen organizado.

Sector tecnológico

Imposición de Aranceles en productos tecnológicos: Trump podría imponer aranceles a productos tecnológicos importados desde México, lo que aumentaría los costos de dispositivos electrónicos, hardware y otros productos tecnológicos.

Renegociación del T-MEC: Podría traer cambios que afecten al sector tecnológico, como modificaciones en la protección de propiedad intelectual de software o estándares de contenido regional para componentes electrónicos. Esto podría obligar a las empresas mexicanas a incrementar el uso de componentes estadounidenses, aumentando sus costos.

Desincentivos para la producción en México: Trump podría incentivar la fabricación de productos tecnológicos en EE.UU., reduciendo la demanda de productos manufacturados en México y afectando la inversión en el sector de tecnología avanzada en México.

Aumento de regulaciones en comercio digital: La administración de Trump podría implementar nuevas restricciones en temas de comercio digital y protección de datos, lo cual afectaría a empresas tecnológicas que dependen de datos transfronterizos. Esto podría complicar el desarrollo y exportación de servicios digitales, como software y soluciones en la nube.

Controles sobre tecnología de exportación: Podrían surgir nuevas regulaciones que limiten la exportación de tecnología avanzada, lo cual afectaría la capacidad de las empresas mexicanas para acceder a tecnologías innovadoras y componentes clave, especialmente en áreas de inteligencia artificial y telecomunicaciones.

Restricciones en outsourcing y servicios de tecnología: La administración de Trump podría limitar la contratación de servicios de outsourcing en tecnología, como desarrollo de software y soporte técnico, desde México hacia EE.UU. Esto impactaría la demanda de servicios tecnológicos mexicanos y afectaría el crecimiento del sector de outsourcing.

Endurecimiento de políticas de inmigración: Políticas más estrictas en visas laborales y de negocios podrían dificultar la movilidad de talento tecnológico entre México y EE.UU., afectando colaboraciones y oportunidades de capacitación para empresas mexicanas de tecnología.

4. Seguridad y Crimen

Presión en la Cooperación en Seguridad: Trump previamente amenazó con clasificar a los cárteles mexicanos como organizaciones terroristas, lo que permitiría una intervención más directa de EE.UU. en los asuntos de seguridad en México. Esto podría traducirse en una mayor presión para que México colabore en iniciativas de seguridad de EE.UU. o permita operaciones estadounidenses en su territorio.

Impacto en la Cooperación en Inteligencia y Aplicación de la Ley: Podría haber un impulso más fuerte para emprender esfuerzos conjuntos contra el narcotráfico y el crimen organizado; sin embargo, esto también podría tensar las relaciones diplomáticas, ya que la soberanía mexicana es altamente valorada, tanto por la ciudadanía como por el actual gobierno.

Foto: Facebook Donald J. Trump 

5. Desarrollo Económico e Inversión

Incertidumbre en la Inversión Extranjera: Las tensiones políticas y la incertidumbre comercial podrían disuadir a algunos inversionistas extranjeros que perciban que las relaciones EE.UU.-México son inestables, afectando el crecimiento económico de México. Por otro lado, el énfasis de EE.UU. en reubicar cadenas de suministro más cerca podría beneficiar la industria manufacturera de México si se alinea con las políticas de Trump.

6. Relaciones Diplomáticas

Posible Tensión en las Relaciones Bilaterales: Un segundo mandato de Trump podría significar una relación menos predecible con México, donde las presiones diplomáticas podrían aplicarse de manera impulsiva. Esto requeriría que México mantenga un equilibrio delicado para evitar conflictos diplomáticos, lo que impactaría la manera en que México aborda su política internacional y su liderazgo regional.

7. Impacto Social y Cultural

Efectos para los Migrantes Mexicanos en EE.UU.: Las políticas enfocadas en restringir la inmigración y endurecer las leyes de deportación podrían afectar a las comunidades mexicanas en EE.UU., posiblemente aumentando las deportaciones e impactando a las familias en ambos lados de la frontera.

Nacionalismo: La posibilidad de un regreso a relaciones tensas también podría alimentar el sentimiento de nacionalismo en México. Esto podría influir en la política mexicana, provocando posturas que defiendan firmemente los intereses y la soberanía de México, tensando la relación con EE.UU. Si bien estos son impactos potenciales que están basados en las políticas anteriores de Trump, los resultados específicos dependerán de qué tan fielmente su segunda administración siga o radicalice el enfoque del primer mandato, qué tanto sea congruente con sus propuestas de campaña, o cómo se ajuste al panorama geopolítico actual. La respuesta de México sería un factor significativo en la configuración de los efectos reales.

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