Desarrollo industrial

Tijuana, en el centro del nearshoring

Es la tendencia de transferir las cadenas de producción y distribución a países cercanos

Tijuana, en el centro del nearshoring
Foto: Especial

Durante la pasada pandemia, las maquiladoras ubicadas en el cordón industrial fronterizo del norte de México se mantuvieron abiertas, sobre todo, las empresas que abastecían las necesidades de Estados Unidos, esa zona hoy es la más atractiva para el llamado nearshoring, que vive un boom en la era posCOVID.

Esta tendencia de transferir y acercar las cadenas de producción y distribución a otros países cercanos a sus principales consumidores es lo que se conoce como nearshoring.

La relocalización de dichas empresas es cada vez una opción más viable y real dado que ayuda a las mismas a reducir sus costos, y a simplificar y optimizar los procesos de distribución en los mercados relevantes.

La mayoría de las empresas atraídas por el nearshoring con interés por instalarse en Tijuana son de Estados Unidos, Asia y en menor cantidad, de países europeos como Finlandia y Alemania.

Los envíos de mercancías desde México a cualquier ciudad de Estados Unidos, puede tomar entre uno a cinco días, lo cual permite a las empresas, optimizar los tiempos de entrega y mantener un mayor grado de supervisión, y rastreo de sus mercancías, así como una atención y respuesta al cliente más eficiente y directa.

“Si la franja fronteriza fuera un país (considerando los estados colindantes de México y Estados Unidos) equivaldría a la tercera economía del mundo”, aseguró hace unos días el presidente nacional del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Francisco Cervantes Díaz.

El presidente del CCE destaca que el intercambio comercial en esta zona es de más de mil 200 millones de dólares diarios; “de ese tamaño es su grandeza y ahí es donde está la oportunidad”, dijo, tras señalar que México crece por encima del 3.5% y Baja California es un estado muestra.

El Consejo Coordinador aseguró que en el plano geopolítico, respecto a las tensiones que sostienen Estados Unidos con China y Ucrania con Rusia, México ofrece oportunidades para el nearshoring o la relocalización de empresas.

Por lo pronto, se dio a conocer hace varias semanas que Tijuana recibirá inversiones por alrededor de los 635 millones de dólares, durante 2023, que se destinarán en la compra de terrenos y la construcción de espacios industriales.

Con lo cual esta zona fronteriza se posiciona como un centro clave y privilegiado para el nearshoring, al sumar 500 mil metros cuadrados de área total rentable, así lo indicó la asociación de Desarrollo Económico e Industrial de Tijuana (Deitac). La inversión prevista se destinará en la construcción y adecuación de espacios industriales y generarían entre 15 y 20 mil empleos directos e indirectos.

De acuerdo con un análisis de la firma de servicios inmobiliarios Newmark, al cierre de 2022 el precio promedio mensual de renta, por metro cuadrado (m2), de este tipo de espacios se ubicó en los 7.91 dólares, es decir un crecimiento de 28.8% respecto al mismo periodo de 2021, cuando registró un valor promedio de 6.14 dólares por metro cuadrado.

Además, esa nueva opción de relocalización de procesos de producción en México trae consigo, adicionalmente, beneficios derivados del nuevo T-MEC, firmado en 2020, pues dicho tratado permite la integración y la optimización de las cadenas de suministro a través de libre circulación fronteriza.

Hoy en día, México es una apuesta segura para las empresas automotrices y productoras de partes para automóviles, en gran medida gracias a los costos competitivos en mano de obra (calificada y no calificada), la experiencia histórica adquirida, la constante construcción y crecimiento y desarrollo de infraestructura. 

PAL

Temas