Las obras públicas, especialmente las consideradas emblemáticas para la administración actual, y la relocalización de cadenas de proveeduría en México, propiciaron que la construcción mostrará en agosto un crecimiento de 47.4 por ciento anual, la mayor tasa desde que hay registro, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
En tanto, la construcción a tasa mensual aumentó 5.2 por ciento, con lo que sumó ocho meses de expansión; y de enero a agosto el alza anual fue de 24 por ciento.
“El rubro general de inversión en construcción alcanzó un nuevo máximo histórico”, dijo Gabriela Siller, directora de Análisis Económico de Grupo Financiero Base.
Desagregando la inversión en construcción, el componente no residencial, que tiene mayor relación con obras del sector público y construcción de infraestructura industrial, observó un crecimiento de 96.2 por ciento anual, siendo también una tasa anual histórica.
En tanto que, de manera mensual la construcción no residencial se incrementó 10.9 por ciento.
“Este comportamiento sugiere que el crecimiento en la Inversión Fija Bruta sigue impulsado por la construcción de obras públicas y nearshoring”, apuntó la especialista.
Por su parte, Marcos Arias Novelo, analista económico de Monex Grupo Financiero, consideró que los resultados de agosto confirman que la economía aumenta su dependencia de la estadística marcada por la construcción.
Para la Dirección General Adjunta de Análisis Económico y Financiero de Banorte, si bien, espera que el comportamiento persista en los meses restantes de 2023, podría tornarse en un factor de riesgo para las perspectivas, pues otros sectores no muestran un empuje cercano.
Por: Verónica Reynold
veronica.reynold@elheraldodemexico.com
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