La ciudad española de Pamplona arranca mañana con los encierros más esperados de la historia, tras dos años de suspensión por la pandemia del COVID-19.
Con el grito ¡Viva San Fermín! ¡Gora San Fermín! los valientes corredores –vestidos en su mayoría de blanco y con una pañoleta en color rojo al cuello– esperan que el chupinazo (cohetón) retumbe en punto de las 8:00 horas (hora local), 2:00 de la mañana de nuestro país, para que las puertas de los corrales se abran y los toros salen en manada. El encierro recorre varias calles del casco viejo de la capital de Navarra, desde la cuesta de Santo Domingo hasta el coso taurino. En total son 875 metros.
La adrenalina, los golpes, fracturas por las caídas y cornadas son una constante de los bureles que se van a lidiar, horas después en el coso taurino.
A lo largo de la historia, han muerto 16 corredores por heridas de asta de toro, 14 de ellos españoles. El primero de ellos fue Francisco García en 1910, y el último, Daniel Jimeno en 2009, el último caso. También hay un mexicano Gonzalo Bustinduy (1935), y Matthew Tasio (EU), en 1995.
Este año se conmemora el centenario de su plaza de toros, durante la denominada Feria de Toro. El primer cartel para celebrarse mañana es con Pablo Hermoso de Mendoza, Morante de la Puebla, El Juli y Roca Rey, ante toros de El Capea y Núñez del Cuvillo.
También habrá dos matadores mexicanos en el serial: Joselito Adame y Leo Valadez.
El primero actúa el 9 de julio, junto a Rubén Pinar y Javier Cortés, ante astados de José Escolar.
Y Valadez, al día siguiente, junto a Rafaelillo y Manuel Escribano, ante bureles de La Palmosilla. La Feria del Toro termina el 14 de julio, con la encerrona de Antonio Ferrera con bureles de Miura.
PAL