La final de la Copa Libertadores será netamente brasileña, por tercera vez.
Con dos goles demoledores al inicio del segundo tiempo, uno de ellos del extremo venezolano Jeferson Soteldo, Santos vapuleó el miércoles 3-0 a Boca Juniors en el encuentro de vuelta para citarse ante el Palmeiras en la final del torneo continental, el 30 de enero en el Maracaná de Río de Janeiro.
En la víspera, Palmeiras selló su pasaje, pese a perder en el choque de vuelta por 2-0 ante River Plate, que se quedó a un tanto de borrar la desventaja del duelo de ida.
Tercera final entre brasileños
Es la tercera final brasileña en la historia de la Libertadores y la primera desde la disputada por Sao Paulo e Internacional, en la edición del 2006. Un año antes, Atlético Paranaense se enfrentó a Sao Paulo.
Santos, tres veces campeón del torneo, llegó obligado a ganar y casi canta el primero tras el pitazo inicial, con un potente remate de Marinho que se estrelló contra el poste y cuyo rebote dejó ir Diego Pituca.
El Peixe carburó mejor en los primeros lapsos y logró abrir el marcador con un tanto de Pituca, a los 16 minutos.
El mediocampista brasileño recibió dentro del área y pasó al venezolano Soteldo, cuyo remate dio en una mano de Lizandro López. La pelota quedó suelta mientras algunos jugadores de Santos pedían penal, lo que aprovechó Pituca para dar un giro y mandarla al fondo del arco de Esteban Andrada.
Boca trató de reaccionar tras el gol, pero no tuvo luces claras, mientras que Franco Soldano y Carlos Tevez, el capitán de 36 años, gravitaron adelante.
Santos mató el juego con dos goles al inicio del 2T
No todo estaba perdido para el Xeneize, puesto que un empate le servía para sellar su pase a la final. Ambos conjuntos habían empatado sin goles en el partido de ida en Buenos Aires la semana pasada.
Pero todo el estante se le vino abajo al equipo argentino, que buscaba su séptima consagración en la Libertadores, con los dos goles que le cayeron al despuntar el complemento: el de Soteldo, a los 49, y el de Lucas Braga, a los 51. A ello se sumó la expulsión del lateral colombiano Frank Fabra por un pisotón a Marinho, a los 56.
Boca Juniors no tuvo ninguna respuesta en adelante, y fue Santos el que pudo haber acrecentado la paliza, lo cual evitó Esteban Andrada en un par de ocasiones.
Santos tendrá la oportunidad ante el Palmeiras de convertirse en el mayor ganar brasileño en el torneo. Su técnico Cuca podría sumar su segunda consagración, después de la que logró con Atlético Mineiro en 2013.
Con información de AP