Perú amaneció este 14 de abril con las banderas a media asta en señal de duelo nacional por la muerte del premio Nobel de literatura Mario Vargas Llosa, el 13 de abril en Lima a los 89 años, cuyos restos fueron trasladados a un crematorio para ser incinerados.
El cuerpo del autor de obras consagradas de la literatura universal como Conversación en la catedral, La guerra del fin del mundo y La fiesta del Chivo, fue velado en privado en la vivienda familiar, por deseo expreso de Vargas Llosa.
El ataúd de madera abandonó el inmueble del distrito de Barranco a bordo de una carroza seguida de una caravana de autos y periodistas hasta un crematorio del ejército peruano en el sur de Lima.
El Comité del Premio Nobel recordó que lo galardonó con el Nobel de Literatura en 2010 por su cartografía de las estructuras de poder y sus imágenes mordaces de la resistencia, la revuelta y la derrota del individuo.
"En la década de 1960, la literatura latinoamericana experimentó un rápido período de desarrollo que ha llegado a ser llamado El Boom, y Vargas Llosa estuvo en el corazón de esta explosión", destacó el Comité en la red social X.

Da presidenta de Perú pésame a deudos de Vargas Llosa
La presidenta peruana Dina Boluarte, vestida con un traje negro, se apersonó al velorio en la vivienda de la familia Vargas Llosa para dar el pésame a nombre del gobierno. Fue recibida en la puerta del edificio por el hijo mayor del escritor, Álvaro Vargas Llosa. Un largo abrazo precedió el ingreso, rodeados de la seguridad presidencial y periodistas.
"No tengo otra cosa que decir que Perú ha perdido a uno de sus mejores hombres, y nosotros a un ser infinitamente querido al que vamos a echar de menos", declaró el hijo de Vargas Llosa.
La familia no indicó la hora ni las causas del deceso, pero el laureado escritor tenía su salud resquebrajada desde que volvió a la capital peruana en 2024 tras dejar Madrid. Al velorio privado llegaron familiares y amigos. Una media docena de arreglos con flores blancas fueron dejados en el edificio ubicado en el barrio de Barranco frente al océano Pacífico.

En Lima, las librerías abrieron colocando en primer plano en sus vitrinas las obras de Vargas Llosa, las cuales ofrecían con descuentos. En el Colegio Militar Leoncio Prado, donde Vargas Llosa estudió y se ambienta la novela "La Ciudad y los perros", los cadetes rindieron homenaje formando filas humanas con las iniciales del Nobel: MVLL.
Con información de AFP