Con la llegada de la Inteligencia artificial uno de los mayores temores que surgió, fue el de ser reemplazados con la tecnología. Debido al alto impacto de esta herramienta en diversas áreas es que la incertidumbre se ha instalado.
Sin embargo el Teorema del mono infinito ha llegado para dar una perspectiva diferente a lo que se cree. Es que esta teoría lo que hace es sacar a la luz aquello que hace vulnerable a la inteligencia Artificial.
¿Cuál es el talón de Aquiles de la IA?
Lo que plantea este teorema es básicamente a un mono tecleando al azar en una máquina de escribir durante un tiempo infinito. Así es que podría reproducir cualquier texto si bien es matemáticamente posible, en la práctica, la probabilidad es tan baja que resulta prácticamente imposible.
Así es que queda ilustrada la diferencia entre la generación aleatoria de información y la creación intencional y significativa, una distinción que destaca la singularidad de la creatividad humana.
Es decir que la creatividad es la capacidad de generar ideas originales y valiosas llevando a cabo la combinación de conocimientos previos. La creatividad humana se basa en la intención, el contexto y la emoción.
La inteligencia artificial puede analizar patrones y luego producir contenidos que se basan en datos existentes, no cuenta con la experiencia subjetiva y la intuición que caracterizan la creatividad humana.
Es por esto que se puede decir que si bien la IA ha tenido un gran avance en las tareas de análisis de datos y reconocimiento de patrones, enfrenta limitaciones en áreas que demandan pensamiento crítico, empatía y originalidad.
Ante esto podemos decir que la debilidad de esta herramienta se encuentra en el arte, la música y la escritura, debido a que necesitan de una comprensión profunda de la condición humana.
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