Durante mucho tiempo, se creyó que la capacidad de recordar nombres era una habilidad exclusiva de los humanos. Sin embargo, un reciente estudio ha demostrado que algunos perros poseen una memoria excepcional que desafía las expectativas. Investigadores de la Universidad Eotvos Loránd en Hungría descubrieron que ciertos canes pueden recordar los nombres de sus juguetes incluso después de dos años sin verlos.
La memoria, un pilar fundamental del lenguaje, ha sido asociada tradicionalmente con los humanos, pero este estudio sugiere que los perros también poseen habilidades cognitivas mucho más desarrolladas de lo que se pensaba anteriormente. Estos hallazgos brindan más datos sobre la inteligencia canina y su capacidad para aprender. Vale señalar que ésto podría ayudar a entender mejor el origen del lenguaje humano.
Interacción entre los perros y sus dueños
Vale mencionar que los investigadores habían identificado casos como el de Chaser, un border collie capaz de aprender los nombres de más de mil juguetes, lo que demuestra las asombrosas capacidades de algunos perros. Sin embargo, lo que este nuevo estudio demostró es que algunos canes no solo aprenden estos nombres, sino que los retienen en su memoria a largo plazo. Según la autora principal del estudio, Shany Dror, esto indica que la memoria canina no se basa únicamente en la repetición o en el juego frecuente con los objetos, sino en un almacenamiento más profundo en el cerebro.
Este estudio es importante para los científicos que investigan la evolución del lenguaje humano. La memoria es uno de los componentes clave del lenguaje, y comprender cómo otros animales la utilizan podría ofrecer pistas sobre qué es lo que hace al lenguaje humano tan único. Además de sus implicaciones científicas, este descubrimiento tiene un impacto directo en la relación entre humanos y perros.
En ese sentido, los perros que demostraron una mejor capacidad para recordar nombres suelen tener una relación más estrecha con sus dueños. Ello resalta la importancia de la interacción y el enriquecimiento mental para desarrollar las habilidades cognitivas de nuestros compañeros caninos. Este estudio nos invita a valorar aún más la inteligencia y la complejidad de nuestras mascotas.
