Sean Kirkpatrick, ex director de la Oficina de Resolución de Anomalías del Pentágono y cabeza visible de lo que se conocía como el equipo de caza de extraterrestres, ha sorprendido al mundo con una revelación impactante. En una entrevista reciente con Peter Bergen, de CNN, Kirkpatrick descartó la teoría de seres extraños detrás de los numerosos avistamientos de ovnis y sugirió que estos son, en su mayoría, "aviones militares secretos".
Esta declaración, lejos de aclarar el misterio, profundiza el enigma alrededor de los objetos voladores no identificados. Kirkpatrick, quien causó controversia el año pasado tras afirmar que los ovnis podrían ser "extraterrestres o tecnología de naciones rivales", ahora ofrece una perspectiva radicalmente distinta, por lo que muchos ahora dudan del juicio o la veracidad de sus palabras.
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Sean desveló, según recogió el diario Daily Star, que muchas de las observaciones reportadas corresponden a "programas estadounidenses reales y avanzados", pero descarta que tengan un origen extraterrestre. Mencionó que esferas gigantes con cubos resultan ser drones esféricos de última generación, equipados con "ocho propulsores en una configuración cúbica". Esta tecnología permite una maniobrabilidad precisa, y según Kirkpatrick, ha sido probada en diversas localizaciones.
La carrera de Kirkpatrick en el Pentágono ha estado marcada por la controversia. Su retiro repentino en diciembre de 2023, apenas días después de hacer comentarios sobre la naturaleza potencialmente extraterrestre o foránea de los ovnis, sumó misterio a su figura. Actualmente, Kirkpatrick se dedica a escribir sobre fenómenos anómalos no identificados, prometiendo arrojar más luz sobre estos misterios.
¿Existen los extraterrestres?
La posibilidad de vida extraterrestre es una cuestión que ha cautivado la imaginación y el interés científico durante décadas. Desde la perspectiva astronómica, el universo es vasto y repleto de innumerables planetas y lunas, muchos de los cuales podrían tener condiciones adecuadas para la vida tal como la conocemos. La existencia de zonas habitables alrededor de estrellas, donde las temperaturas permiten la presencia de agua líquida, es un factor clave en esta búsqueda. Además, el descubrimiento de extremófilos en la Tierra, organismos que prosperan en condiciones extremadamente duras, sugiere que la vida podría adaptarse a entornos que antes se consideraban hostiles.
Por otro lado, hasta la fecha, no se ha encontrado evidencia concreta de vida extraterrestre. Las misiones espaciales y los telescopios han buscado signos de vida, especialmente en Marte y en lunas de planetas gigantes como Europa de Júpiter y Encélado de Saturno. Aunque se han detectado indicios prometedores, como metano en la atmósfera marciana o géiseres de agua en Encélado, estos no son pruebas definitivas de vida.