Luego de que se dieran a conocer las imágenes e historias respecto a la situación actual de Afganistán, el debate internacional se ha centrado en algunos temas particulares, como la seguridad e integridad de las mujeres, quienes han sido víctimas de una serie de violaciones a los derechos humanos. La preocupación por las mujeres en este país ha escalado hasta las plataformas digitales, medio a través del que internautas han decidido expresar su opinión sobre el tema.
Cabe recordar que no es la primera vez que los talibanes llegan al poder, pues esta fracción política ya había formado parte del gobierno en 1996 y 2001, años en los que se estableció, como parte de la ley islámica, que las mujeres afganas no podían estudiar, trabajar ni salir de casa si no estaban acompañadas por un hombre de su familia. Entre las imposiciones, también se encontraba el uso obligatorio del burka en lugares públicos.
Así vivían antes de 1996
Durante los últimos días, la información respecto a la guerra en Afganistán se ha difundido y viralizado en redes sociales, tal como ocurrió con una fotografía compartida por Getty Images. En la imagen pueden observarse tres mujeres estudiantes caminando por Kabul, presentemente en 1972. Las tres jóvenes portan minifaldas, el rostro descubierto, al igual que el cabello y los brazos, algo que no concuerda con las normas actuales.
Además, se encuentran hablando y riendo, algo que tienen prohibido actualmente, pues ningún hombre desconocido puede escuchar la voz de otra mujer. Esta serie de imposiciones comenzaron en el año 1996, la primera vez que los talibanes llegaron al poder y Afganistán comenzó a atravesar una serie de crisis y un ambiente bélico como parte de su cotidianidad debido a la invasión de la Unión Soviética y la posterior intervención estadounidense.
¿Cuestión de privilegio?
A pesar de que esta comparación entre 1972 y los años posteriores, Ali M. Latifi, quien se desempeña como periodista independiente de Kabul, aseguró al medio BuzzFeedNews que el porcentaje de las mujeres que podían realizar ese tipo de acciones, como vestir con la moda occidental, acudir a las universidades y estudiar, era muy reducido y correspondía a las personas privilegiadas que habitaban ciertas ciudades.