Todo adulto que tenga hijos en edad de infancia en casa, sabe que una de las facetas más complicadas a trabajar con ellos es la hora de dormir. El ir a la cama puede convertirse en todo un dilema, tanto para el niño o niña como para el adulto. Muchas veces, el éxito o fracaso de este momento para ir a descansar correctamente, está directamente relacionado a los hábitos que el adulto proyecte y el infante absorba.
Y, por lo tanto, la complejidad para saber si es el niño quien decide su mejor forma de descansar y dormir o es el adulto quien impone en la niñez estos patrones de conducta, queda expuesta en cada noche.
Los niños que no quieren o pueden dormir en la noche
En todos los años como profesional del sueño, Liliana Amaro, Coach de Sueño infantil y Fundadora de Zzleep My Baby, ha visto situaciones donde los niños no pueden conciliar correctamente el sueño y, por ende, descansar lo necesario. Situaciones de índole internas o emocionales, así como estímulos de su entorno, dan por resultado que los padres muchas veces tienen escenarios parecidos a:
- Mi hijo no quiere acostarse en su cuna/cama.
- Cada vez que le digo a mi hijo que es hora de acostarse, él me dice que no quiere.
- Me tengo que ir al otro cuarto porque mi hijo me patea.
- Mi hija me corre de mi cama cuando se pasa por la noche así que para dormir bien me voy a la otra habitación.
- Mi hijo me pide leche todas las noches (lo curioso es que el bebé tiene solo 3 meses y no sabe hablar).
- Mi hijo se levanta, me va a buscar a mi cama todas las noches y me tengo que ir con él a dormir a su camita en la que apenas quepo.
Los niños no eligen y los padres se doblegan
Estos escenarios viven cada noche con los pequeños, pero ¿Los niños pueden tomar decisiones a la hora de dormir? Liliana Amaro, comenta que en realidad los niños no pueden tomar decisiones a la hora de dormir.
Lo que sucede es que un adulto al responder con obediencia a este tipo de conductas se doblega a la “autoridad de los niños o bebés” y simplemente reacciona de una manera simple y sin pensar en las repercusiones que ésta conducta ocasiona.
Los padres y adultos son la guía de los pequeños y es necesario concientizar que todas las conductas que los niños presentan se deben a la forma de enseñanza de los adultos que están encargados de la crianza.
Algunos padres viven estos escenarios y no hallan la forma de cambiar las conductas, ya que así ellos logran dormir mejor que si intentan disciplinar a los niños.
¿Qué hacer para que los niños duerman mejor y más temprano?
Como coach de sueño, Liliana Amaro invita a reflexionar en la situación actual de cada padre de familia a la hora de dormir. Las conductas incorrectas que los hijos tienen son conductas que los padres permiten.
- Tomar la decisión de cambio y comenzar a establecer límites y enseñanza de autoridad es mucho mejor para los pequeños.
- La carencia de una figura de autoridad suele confundirlos y desvanecer la personalidad debido a que no tienen una referencia ejemplar en el hogar.
- Los bebés entran en rutina muy fácil y se ha comprobado que los que siguen rutinas son bebés más tranquilos y contentos.
- Los bebés tienen noción de las actividades que se realizan ya que son repetitivas.
- En niños más grandes la conducta social es mucho más positiva cuando saben obedecer y entender a los adultos.
HA DICHO
"Como padre es necesario que tomes conciencia de que tipo de guía quieres ser pues las conductas actuales, tendrán repercusión en el futuro. Dedicación, Enseñanza y Amor es la clave de una crianza con éxito.” – Liliana Amaro, Coach del sueño infantil.