Los pelajes de los gatos pueden tener cientos de combinaciones, pero una de las más famosas es la que llevan los felinos llamados tricolor, cálico o carey. Estos mininos, y en especial el género femenino, son una raza muy especial, pues la combinación de los colores nunca será igual.
Otra particularidad que hace especial a estos felinos es que casi todos son hembras, un gato tricolor es aquel que tiene entre sus colores el naranja, el blanco y el negro. El naranja esta ligado al cromosoma X, que contiene un gen que determina el color, naranja o no naranja.
Los machos tienen los cromosomas XY, por lo tanto solo tienen un cromosoma X y un solo gen que puede ser naranja, pero las hembras tienen los cromosomas XX, lo que permite que un gen determine el color naranja y el otro no. Esto es lo que genera la aparición de los tres colores.
Aún así, se pueden presentar anomalías genéticas o mutaciones que permitan nacer un macho tricolor, aunque la posibilidad es de 1 de cada 3 mil tricolores.
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Tonos y leyenda de los gatos tricolor
Los colores en este tipo de gatos puede ser una mezcla de naranja y sus variantes; negro y tonos similares como gris y finalmente el blanco.
Existe una leyenda sobre su origen, según cuenta, hace muchos años, en el siglo XII, en los monasterios del Tíbet, los monjes solían estar en permanente desacuerdo. Un día tres monjes pidieron hacer ayuno durante tres días para relajar su espíritu y encontrar la iluminación.
Al día siguiente, apareció en el monasterio una gata tricolor junto a sus crías del mismo pelaje. Los monjes acogieron a la familia felina y durante varios días sólo hablaron de ella.
Un día los monjes se reunieron para meditar sobre la calma que les había traído la nueva familia y uno de ellos, luego de meditar, explicó, ellos poseen los tres colores, el blanco y el negro son el yin y el yang, y su pelo color de la tierra, es donde vivimos. "Significa que aquí, si nos unimos, podemos conciliar nuestras diferencias formando una unión y así conseguir la paz"
El monje más anciano preguntó porque las tres crías eran hembras y uno de los jóvenes dijo: "Nosotros no poseemos el don de la vida, una mujer sí. Son hembras y traen un mensaje nuevo, de mutación y cambio".
Por lo general son gatas amorosas y cariñosas, pero demandantes, les gusta que sus dueños las acaricien y consientan. Si son de pelo largo necesitarán que las cepilles, para que no se enrede su pelaje.
Y para los supersticioso, también existe una leyenda sobre sus poderes contra los fantasmas, dicen que hace muchos de años, los pescadores japoneses iban con gatas calicó por los mares como amuleto contra las tormentas y fantasmas.