Si arrasó en las urnas, es la persona más votada en la historia del país -con casi 36 millones de votos- y su partido tiene mayoría en el Congreso, ¿por qué Claudia Sheinbaum ha sido cercada por su antecesor?
A 33 días de abandonar la Presidencia, López Obrador no hace más que colocar obstáculos a su sucesora. Le complica el arranque de gobierno, le hereda problemas, y le abre frentes a diario. En los hechos, le acota el margen de maniobra.
Ejemplos, abundan. Como regalo de bienvenida, el presidente ha empujado sus iniciativas de reforma a la Constitución, para delinear la ruta a seguir después del 1 de octubre..
En un carril, presiona para que, antes de concluir su sexenio, se apruebe la reforma al Poder Judicial y se extingan órganos autónomos, lo que contraviene (en lo que toca a Cofetel y Cofece, por ejemplo) lo firmado por México, EU y Canadá en el T-MEC, y ante lo que se ha desatado una ola de nerviosismo e incertidumbre que espantan la inversión y pueden dañar la economía profundamente.
¿Quién en su sano juicio invertirá en un país donde se maquilan leyes a capricho, cambian las reglas del juego a medio partido y hay nula certeza jurídica?
Entre la noche previa a la elección y ayer, el peso se ha depreciado más de 20% frente al dólar: se vendía hasta en en $20.60 en ventanillas bancarias.
Las criticas llegan desde muy distintos lugares y abren nuevos frentes. Ya no solo es el pleito con las calificadoras (que al presidente podrán no importar, pero son referente para los grandes capitales), los integrantes del Poder Judicial, los medios de comunicación y periodistas, organizaciones de la sociedad civil o empresarios, en el ocaso del sexenio, AMLO se confronta con nuestro principal socio comercial, EU y “pausa” la relación con su embajada.
Los vecinos del norte están preocupados por el sinsentido que avanza como reforma al Poder Judicial, que incluye tómbola para convertirse en juez o magistrado y cartas de recomendación para ganar un lugar en el sorteo.
En lo político, también López Obrador estrecha el margen.
Ha presionado para que hombres y mujeres cercanos a él se mantengan en el próximo gabinete; y acotó el poder de la próxima presidenta definiendo quién encabezará Morena -Luisa Alcalde, su aun secretaria de Gobernación-, y quienes coordinarán los grupos parlamentarios: Ricardo Monreal en San Lázaro y Adán Augusto López Hernández, en el Senado.
La próxima presidenta no decidió quiénes serán los líderes de la mayoría en el Congreso. La próxima secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, es incondicional del presidente. El Fiscal General Alejandro Gertz también será transexenal, lo mismo el secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O.
López Obrador le amuralló el camino. La cercó. Le puso tantos obstáculos que su prioridad, en lugar de gobernar, será gestionar la ruta minada con la que se topó. AMLO le puso demasiados controles que pueden distraerla de lo esencial, y forzarla a tener como prioridad lidiar con las consecuencias de las decisiones heredadas, en lugar de imprimir su sello propio a la brevedad.
En el ocaso de su sexenio, el presidente condujo al país a un río revuelto que marcará su adiós, y podría detonar en una crisis de pronóstico reservado.
Eso le heredaría, a manera de regalo de bienvenida, a Claudia Sheinbaum.
POR MANUEL LÓPEZ SAN MARTÍN
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