Mientras por buenas y necesarias razones se escudriña el batidillo de contradicciones del hijo del Presidente, no alcanzamos a ver que nos dirigimos a un precipicio profundo.
Veamos, en el recuento mundial que hace la connotada revista The Economist, nuestro país deja de ser una democracia híbrida, a descender y verse como una “una democracia autoritaria”, algo muy cercano a los renglones dictatoriales. Esto tan solo en los últimos tres años pues atiende a estos factores claves: la muerte de periodistas, las violaciones legales y las obstrucciones a la justicia. Consideradas como auténticas democracias, se juntan hasta arriba del escalafón a los cuatro países escandinavos.
En otro elemento digno de consideración está el desplome de las inversiones españolas. Solo en lo que va del sexenio, los inversionistas se han retirado en 36%. ¿Qué se puede esperar cuando se le pide a la monarquía se disculpe, e implore perdón por la conquista ocurrida hace 500 años cuando España no existía y México tampoco. ¡500 años atrás!
Se hable pestes del gobierno y las empresas españolas y se termine sugiriendo una pausa en las relaciones. Con este trato, es lógico que las inversiones, en lugar de aumentar como lo desea el ministro de Relaciones Exteriores español, se vayan al despeñadero.
Otro negocio que para el país se viene abajo, es la exportación de aguacate. “El Oro verde” no podrá viajar a Estados Unidos mientras no se aclare la amenaza que se hizo a un miembro de la Inspección Sanitaria de Plantas y Animales del Departamento de Agricultura. Así, los agricultores de Michoacán sufren un grave descalabro dado que la llamada al inspector yanqui, provino de un penal en Ecatepec, Estado de México. No solo es pérdida de millones de dólares para el país sino el estigma de que son los sicarios y las bandas de narcos, los que dictan las reglas en México.
El estudio de la Asociación de Internet MX y OCC Mundial, estima que México es el país en que las personas trabajadoras sufren el mayor estrés laboral que el resto del mundo. Entre otras cosas, frena el desarrollo, la competitividad y la salud integral de los mexicanos. En ese análisis pormenorizado, por edades, géneros, localización geográfica y disponibilidades varias. Y bien lo sabemos, no solo es por la pandemia que muchos países han tenido, es por el conjunto de elementos que gravitan sobre nosotros: división ideológica, violencia sin límites, injusticia e impunidad, educación degradada, falta de techos dignos, ambiente inseguro y falta de trabajos estimulantes y creativos.
Por supuesto, faltarían muchas más categorías para señalar el por qué nos encontramos instalados en la indiferencia o el pandillerismo, sin identidad colectiva o en vías de alcanzar otra más primitiva. Nos urge un proyecto digno de nación.
POR RAÚL CREMOUX
ESCRITOR Y PERIODISTA
@RAULCREMOUX
MAAZ