Para renovar la esperanza de aquellos que se ven obligados a migrar, habrá que hacer un esfuerzo en muchos frentes. No desperdiciemos la ocasión. Es cooperación, no intervención
En una semana tendrá lugar la reunión entre el presidente López Obrador y la vicepresidenta de EU. Entrevista presencial importante para la relación bilateral y la cooperación regional con la administración Biden-Harris.
Participé en encuentros de centros de pensamiento donde se ha hablado del viaje y sintetizo la posición de EU respecto al mismo:
1.- EU busca ordenar la migración, en el contexto de una era de migración masiva en el mundo y no sólo como una “crisis” recurrente, para evitar manipulaciones políticas.
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2.- El reconocimiento por parte de EU de que México es un país de origen, tránsito y destino de migrantes.
3.- EU busca alinear su diagnóstico y posibles soluciones. Quiere estar en “el mismo lado que México”, según dijo un alto funcionario estadounidense. En este contexto, ambos gobiernos coinciden en enfrentar “las raíces de la migración”.
4.- EU otorga una importancia especial a la relación con el sector privado, ya sea, estadounidense (la vicepresidenta tuvo una primera reunión con líderes empresariales que anunciaron inversiones en la región centroamericana) o latinoamericana, para impulsar un compromiso que priorice la creación de empleos y el desarrollo económico.
5.- La cooperación en materia de migración con México tendrá una aproximación regional hasta Colombia, lo que llevaría a incluir en el diálogo a otros países centroamericanos como Costa Rica y Nicaragua. Ello explica el viaje del secretario de Estado, Antony Blinken, a Costa Rica el día de hoy, donde se reunirá con altos funcionarios centroamericanos y de México.
Esta síntesis muestra que hay puntos de coincidencia entre la visión de México y la de EU para la cooperación en materia migratoria.
Por supuesto, se abordará también, lo relativo a la seguridad, en particular el tráfico ilícito de personas y la creciente expansión de las organizaciones de crimen transnacional organizado. Otro tema seguramente será la cooperación en materia sanitaria, al enfatizar la atención urgente y especial a América Latina en materia de vacunación y la prioridad a las zonas rurales.
Esta primera reunión debe resultar exitosa para avanzar en la cooperación. Obstáculos los hay y muchos. Entre ellos los problemas de corrupción y gobernabilidad, que han llevado a una tensa relación entre EU, Honduras y El Salvador; la inseguridad prevaleciente en varios de los países; la pandemia de COVID; la relativa falta de competitividad; la violencia de género; la inseguridad alimentaria y el cambio climático.
La oportunidad de avanzar en una visión común y en soluciones prácticas de corto, mediano y largo plazo está ahí. La expansión de Sembrando Vida es una opción, puede ayudar a arraigar a las personas a su comunidad. Para renovar la esperanza perdida de todos los que se ven obligados a migrar, habrá que hacer un esfuerzo en muchos frentes. No desperdiciemos la ocasión. Es cooperación, no intervención.
POR MARTHA BÁRCENA COQUI
MARTHA.BARCENA@ELHERALDODEMEXICO.COM
@MARTHA_BARCENA
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