Colima dio la sorpresa este año con los primeros casos de rabia registrados en casi 30 años en México. Primero, el 31 de enero, se detectó esta enfermedad en un perro; posteriormente, el 4 de febrero, se confirmó en un humano. Motivo por el cual la Secretaría de Salud local inició una campaña de vacunación preventiva para evitar la transmisión de esta enfermedad.
¿Qué es la rabia?
De acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la rabia es una zoonosis viral que afecta a todos los mamíferos, sean estos domésticos o salvajes, inclusive al hombre, y se transmite a través del contacto con la saliva infectada por medio de mordeduras o arañazos.
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Por primera vez en 30 años, se confirma rabia en un perro en Colima
Colima reporta el primer caso de rabia en humanos, había estado erradicada por más de 30 años
Dicho virus tiene presencia en más de 150 países de todos los continentes; asimismo, es responsable de casi 60 mil muertes anuales en todo el planeta y, generalmente, la rabia se transmite a humanos por la mordedura de perros infectados.
En el continente americano se ha reducido este tipo de transmisión en cerca de un 98%, de tal modo que en México se tenían casi 30 años sin presentar casos de este virus en personas; sin embargo, este año se detectó el primer caso en un perro y en un humano.
¿Son comunes los casos de rabia?
Los registros continentales oficiales registraron que en 1983 se registraron 300 casos de rabia, pero para 2020, sólo se detectaron dos, lo que representa un avance notable en la prevención de esta enfermedad, misma que sólo tiene presencia en América Latina y del Caribe, pues Estados Unidos (EU) y Canadá están libres de ella.
Desde 1983, la OPS es responsable de la coordinación del Programa Regional de Eliminación de la Rabia humana transmitida por perros, el cual brinda cooperación técnica a todos los países de la región, incentivando la profilaxis post-exposición.
¿Cómo se detecta la rabia?
El periodo de incubación de la rabia suele ser de dos a tres meses; sin embargo, existen casos donde se puede manifestar en pocas semanas o hasta un año, todo dependerá del huésped. No obstante, los síntomas suelen ser los mismos: fiebre, dolor y sensaciones de hormigueo, picor o quemazón en la herida inusual o no explicables por otra causa.
También se pueden desarrollar dos tipos de rabia: la furiosa o la paralítica. En el primer tipo, el paciente presenta hiperactividad, excitación, alucinaciones, falta de coordinación, hidrofobia (miedo al agua) y aerofobia (miedo a las corrientes de aire o al aire libre). Finalmente, la muerte se presenta por paro cardiorrespiratorio.
En el segundo tipo de rabia, la menos conocida, los músculos se van paralizando gradualmente, empezando por los más cercanos a la herida. Después, el paciente entra en coma lentamente y muere.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que el tratamiento puede aliviar los síntomas pero en pocos casos conduce a la curación y los sobrevivientes sufren graves déficits neurológicos, pues en la medida que el virus se desplaza, llega al sistema nervioso central, aparece una inflamación progresiva del cerebro y la médula espinal.
¿Cómo se atiende la rabia?
De acuerdo con la OMS, el tratamiento dependerá del tipo de contacto que se tenga con el animal presuntamente rabioso; los tipos de contactos se categorizaron en tres niveles y, en consecuencia, el tratamiento también.
El primer tipo es cuando se tocan o alimentan a animales rabiosos o si existe una mordedura que dejó la piel intacta. En este caso se recomienda lavar la superficie expuesta y no requiere de medidas profilácticas posexposición (PPE).
Para el segundo caso, que es cuando existe una mordedura y/o arañazo que lesionara la piel, se recomienda lavar la herida y vacunar inmediatamente.
Por último, cuando son varias mordeduras o arañazos transdérmicos con contaminación de mucosas o el contacto fue con un murciélago, se recomienda lavar la herida, vacunar inmediatamente y administrar inmunoglobulina antirrábica o anticuerpos monoclonales.
