El diputado tabasqueño Mario Rafael Llergo dio a conocer que inició una denuncia en contra del consejero electoral Ciro Murayama por haber incurrido en una falta de sus responsabilidades administrativas al haber calificado como un acto electoral una reunión sostenida por Mario Delgado y Adán Augusto López con gobernadores integrantes del Movimiento de Regeneración Nacional.
En la acusación hecha ante el Órgano Interno de Control del Instituto del Instituto Nacional Electoral se destaca una publicación hecha a través de su cuenta de Twitter en la que incluye el siguiente tuit.
"Mientras el artículo 134 de la Constitución prohíbe a los funcionarios públicos influir en las elecciones, en la @SEGOB_mx se reúnen gobernadores para acordar piso parejo a los aspirantes del gobierno a la presidencia. Es inaudito el desprecio desde el poder a la Constitución", dijo.
Este señalamiento acusa una presunta omisión del consejero electoral de los artículos 1;16; 41 base V; 108 y 109 de la Constitución Mexicana, así como los artículos 1; 2 y 7 de la Ley General de Responsabilidades Administrativas de los Servidores Públicos.
Además de esto, Llergo indica que el funcionario público prejuzgó el acto y actuó con parcialidad al condenar lo ocurrido, lo cual está fuera de sus facultades dentro de la función pública.
"De esta manera, en su actuar, se encuentra emitiendo una opinión sobre un asunto que está en el ámbito de su competencia como árbitro electoral pues, ante una eventual denuncia, a él le corresponde analizar la misma", escribió.
Destacó que quedó comprobado que se emitió una opinión debido a que está tomando en cuenta información que se publicó en un medio de comunicación sin que hubiera habido una confirmación oficial sobre ello.
Estos comentarios, añade desequilibran la contienda electoral, lo cual además representa otra infracción debido al cargo del funcionario, aseguró.
El senador del Grupo Plural, Emilio Álvarez Icaza también se sumó a estas críticas sobre la reunión del secretario con los gobernadores y después aseguró que la acusación en contra Murayama son infundadas, debido a que el consejero no mintió al respecto de la reunión.
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