Todo final tiene un inicio y en la mayoría de las historias del narcotráfico, los finales terminan en muerte o en la cárcel mientras los inicios suelen suceder desde lo profundo de los sectores socioeconómicos.
En el mundo del tráfico de drogas, se dice que los miembros de los cárteles no quieren ser empleados sino hombres de negocios que toman riesgos y disfrutan de su autonomía con grandes cantidades de dinero, pero previo a ello fueron inevitablemente parte del sistema.
¿A qué se dedicaban los narcos más poderosos de México antes de serlo?
Algunos de los capos más poderosos del país ya sea que aprovecharon la oportunidad de sus circunstancias o bien la necesidad de “salir adelante” de manera rápida para formar imperios a base de “plata y plomo” que los convirtió en los criminales más buscados tanto en México como en Estados Unidos, aquí algunos ejemplos:
Miguel Ángel Félix Gallardo
Tal es el caso de Miguel Ángel Félix Gallardo, el “Jefe de jefes”, el hombre que volvió al narco tan organizado como las empresas más grandes del mundo. De ser un policía y después un judicial en Sinaloa llegó a ser el narcotraficante más poderoso de México al tomar riesgos y acudir personalmente hasta Colombia para negociar con los capos más peligrosos, entre ellos Pablo Escobar.
A pesar de que Félix Gallardo solo cursó la secundaria, su ambición lo llevó a aprovechar sus contactos al ser escolta del otrora gobernador del estado, Leopoldo Sánchez Célis, hasta formar el primer cártel del país, el de Guadalajara junto con Ernesto Fonseca “Don Neto” y Rafael Caro Quintero, el siguiente en la lista.
Rafael Caro Quintero
El “Narco de narcos” vivió sus primeros años en el seno de una familia de escasos recursos. Su primer empleo fue como chofer de un camión hasta que le ofrecieron sembrar marihuana en los terrenos de su padre donde comenzó así con el negocio de la droga, hasta que junto con su compadre Miguel Ángel Félix traficaron cocaína.
Los hermanos Arellano Félix
El padre de los Arellano, Benjamín Francisco Arellano Sánchez era el propietario de una mercería donde los hermanos Arellano Félix trabajaban, pero dentro de ella comenzaron a ser “fayuqueros” al vender ropa usada, alcohol y cigarrillos de contrabando. Además los nacidos en Culiacán, también formaron el Sonido Escorpio integrado por Ramón, Francisco y Benjamín que amenizaba las fiestas en los barrios.
Amado Carrillo Fuentes
“El señor de los cielos” antes de dominar los caminos del aire era un asiduo trabajador del campo donde además de sembrar, ordeñaba vacas y hacía otras labores que un rancho necesita para progresar. Su tío Ernesto Fonseca “Don Neto” lo enlistó en el narco cuando le pidió pesar cargas de marihuana en Guadalajara.
Ismael el “Mayo” Zambada
El “Mayo” se ganaba la vida de forma dura pero honesta. La condiciones de pobreza en las que vivía tanto él como su familia en la década de 1970 lo llevaron a hacer varios trabajos, entre ellos, limpiar las llantas de los camiones que ingresaban al ingenio azucarero en las inmediaciones de Culiacán. Sería hasta que conocería a su futuro cuñado el cubano Antonio Cruz quien lo iniciaría en el mundo del narco en Los Angeles, California.
Hoy en día, Ismael el "Mayo" Zambada es el narco mexicano por el que se ofrece una mayor recompensa.
Nemesio Oseguera Cervantes
"El Mencho" abandonó la escuela cuando cursaba el quinto de primaria en el municipio de Aguililla, Michoacán para cuidar los campos de aguacate que era propiedad de la familia Valencia que era conocida como el Cártel del Aguacate al traficar marihuana oculta en los cargamentos del "oro verde" mexicano. Ahí Oseguera Cervantes escaló peldaños hasta llegar a ser el vigilante de los plantíos y posteriormente ser traficante para liderar el Cártel Jalisco Nueva Generación.
Joaquín “El Chapo” Guzmán
“El Chapo” fue un niño pobre, su padre era un gomero, un campesino que sembraba opio, el único producto que aún se sigue sembrando en Badiraguato. Guzmán Loera dejó la escuela para trabajar en un puesto de naranjas hasta que al cunplir 15 años comenzó a sembrar marihuana que era rentable al venderla por medio de su tío Pedro Avilez Pérez, así fue el inició del líder del Cártel de Sinaloa.
RM