Esta mañana decenas de pobladores de la comunidad de Xuchitlán, en el municipio de San Salvador, bloquearon la carretera federal México-Laredo a la altura de la comunidad de Julián Villagrán, en el entronque con Xuchitlán, además de que bloquearon la carretera estatal Ixmiquilpan-Progreso.
Los inconformes colocaron piedras e incendiaron algunos papeles para evitar el paso de los vehículos como forma de protesta por la represión policiaca de la que fueron víctimas el pasado 1 de junio a las afueras de Palacio de Gobierno del estado, en donde murió el joven Leobardo.
Los manifestantes demandaron justicia por los hechos y solicitaron que los policías estatales responsables del asesinato de Leobardo sean procesados conforme a la ley, aunado a que se les garanticen condiciones de desarrollo, debido a que únicamente exigían el cumplimiento de diferentes proyectos de obras públicas en el municipio.
Acusaron que no han obtenido respuesta positiva por parte del gobierno estatal, ya que no ha existido comunicación directa con las autoridades para el cumplimiento de los proyectos de obras públicas que han solicitado y por ello demandaron que se atiendan sus peticiones tras la conclusión del proceso electoral.
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Hasta el momento, las vialidades en ambos sentidos de las dos carreteras permanecen cerradas a la circulación y han quemado algunas llantas, por lo que amagaron con continuar con los bloqueos hasta que reciban alguna respuesta por parte de las autoridades estatales.
El pasado 1 de junio pobladores de Xuchitlán se manifestaron a las afueras del Palacio de Gobierno para exigir el cumplimiento de obras públicas, sin embargo, fueron agredidos por policías estatales que lanzaron gas lacrimógeno, por lo que el joven Leobardo Hernández resultó herido y trasladado al Hospital General de Pachuca, sin embargo, por la gravedad de las lesiones falleció.
Al respecto, la Fiscalía General de Justicia del Estado de Hidalgo abrió la carpeta de investigación por el delito de lesiones, pero tras el deceso del joven lo reconfiguró a homicidio culposo, aunque el policía estatal permanece en libertad condicional.
Por José García
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