En Baja California Sur es uno de los estados con más riquezas naturales: destacan Los Cabos, La Paz, Tijuana y Ensenada. No obstante, en el extenso territorio hay un sitio que guarda una historia extraordinaria. Hablamos de Santa Rosalia, un pueblo del municipio de Mulegé, en las costas del Mar de Cortés.
Este pueblo es la cabecera de este municipio, y es considerado una pequeña ciudad. Asimismo, es un lugar único en la región por su estilo arquitectónico.
Origen Santa Rosalía:
De acuerdo con Viajero de México, fue fundada a principios de 1700. Se presume que los europeos llegaron a la zona como parte del proceso de evangelización.
Tras la concesión del presidente Porfirio Diaz, fue fundada en este puerto la compañía minera Compagnie du Boleo, proveniente de Francia, luego que descubrieron minerales valiosos tras la exploración en la zona.
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Esta compañía francesa mandó a construir casas, iglesias y escuelas para las familias de los trabajadores.
Durante varios años, Santa Rosalía fue la única población de la península de Baja California que contaba con energía eléctrica. A nivel nacional, la Ciudad de México era la única que tenía.
Tuvo abundancia de tecnología, principalmente por las cosas que traían de Europa, con el objetivo de conservar la minera. Sin embargo, cuando se agotaron los recursos la compañía cerró sus puertas, pero la región se consolidó como una de las economías más fuertes.
Las construcciones que se hicieron en la zona aún siguen en el lugar, pues se ha tratado de mantener la tradición del pueblo.
Entre los lugares más representativos están El Palacio de Gobierno, la Iglesia de Santa Bárbara, el Hotel Francés y el Barrio Mesa Francia.
égm