La Catedral de Nuestra Señora Inmaculada de la Concepción en Puebla es una obra de arquitectura colonial que adorna la ciudad desde el siglo XVII. Su construcción inició en 1575, pero no fue consagrada sino hasta el 18 de abril de 1649.
La UNESCO ha nombrado a este recinto Patrimonio de la Humanidad y, por si fuera poco, es considerada un museo de arte novohispano por la colección de obras que se encuentran en el interior.
Esta catedral fue el primer templo suntuoso de América y fue bendecida en 1649.
Una de las características más impresionantes de la catedral es que su atrio está rodeado por 58 ángeles que, se dice, la custodian día y noche.
Este hecho se debe a una de sus leyendas más famosas, pues cuentan que fueron los ángeles quienes subieron la campana Santa María a la Torre. Se dice que los hombres que trabajaron en la construcción pasaron 30 días intentando subir la campana de más de 8 toneladas y algunos fallecieron en el intento.
Una noche, el guardia de la construcción visualizó en sus sueños cómo unos ángeles bajaron del cielo y subieron la campana. Al amanecer, se escuchó el repique de la campana y los trabajadores vieron que ya estaba colocada en la torre; por lo que se dice que la iglesia fue construida por ángeles.
La Torre Norte de la Catedral se terminó de construir en 1678 y es la única que tiene campanas, 10 en total: dos grandes, dos medianas, tres pequeñas y tres aún más pequeñas y la del reloj.
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Otro de los nombres con los que se le conoce son la Catedral Basílica de Puebla o, simplemente, como la Catedral Poblana.
Actualmente, el protocolo de ingreso involucra el uso obligatorio de cubrebocas y gel antibacterial, desinfectar el calzado antes de entrar, control de temperatura y sana distancia.
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