Sin respetar la sana distancia, cientos de ciudadanos se concentraron en el municipio de Xico, la noche del domingo, para la inauguración de la villa iluminada y el encendido del pino de Navidad, pese a la pandemia del SARS-COV-2.
El ayuntamiento colocó adornos y luces en las calles del pueblo mágico, mismos que atrajeron a familias completas de dicho lugar y de municipios aledaños, como Coatepec, Teocelo y Xalapa.
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Sobre la avenida principal Miguel Hidalgo y Costilla, se observó a adultos, jóvenes y niños que carecían de cubrebocas o protección facial.
Lo anterior, pese a que el municipio de Xico se encuentra en semáforo epidemiológico regional color naranja, de riesgo alto de contagio, con 60 casos confirmados, 15 defunciones y 13 sospechosos.
Mientras que la entidad veracruzana está en semáforo amarillo, de riesgo medio de contagio, donde las autoridades sanitarias reportan casi 40 mil casos positivos acumulados y más de 5 mil 600 defunciones.
El secretario de Salud de Veracruz, Roberto Ramos Alor, ha insistido a autoridades municipales y a la población en general que no se lleven a cabo eventos que concentren a un elevado número de personas.
Sin embargo, la alcaldesa de Xico, Gloria Galván Orduña, indicó que fue necesaria la realización del evento para reactivar la economía en el pueblo.
Además, justificó que empresarios de la región le solicitaron, mediante un oficio, que reactivara la economía o, de lo contrario, cerrarían sus establecimientos, ante las inminentes pérdidas registradas por la emergencia sanitaria.
“Xico está en semáforo amarillo y ayudará a las familias, tengo una carta dirigida a mi persona donde me están pidiendo reactivar la economía sino van a cerrar sus negocios”, expresó con notorio desconocimiento sobre el semáforo regional emitido por la Secretaría de Salud para dicho municipio.
La presidenta municipal declaró este lunes que los empresarios del pueblo mágico necesitan acciones gubernamentales para reactivar el turismo y tener derrama económica.
En ese sentido, consideró que si no mueren de coronavirus podrían fallecer de inanición ante la falta de ingresos para el sustento de sus familias.
“Si no se van a morir de una cosa se van a morir de otra”, opinó Galván Orduña, edil emanada del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Cabe recordar que Xico se encuentra a unos 23 kilómetros de la capital de Veracruz, donde ha sido constante el desacato de las recomendaciones emitidas por autoridades sanitarias.
En julio pasado, cientos de pobladores salieron a las calles de Xico para bailar, cantar y embriagarse durante la “noche del cencerrero” por la fiesta patronal en honor a Santa María Magdalena, pese a que el ayuntamiento había cancelado todas las actividades por coronavirus.
Por: Juan David Castilla Arcos