Ante el alza en los casos de COVID-19 en Baja California, el gobernador Jaime Bonilla aseguró que sería un error dejar que los niños pidan dulces casa por casa, por lo que ya se analizan medidas para evitar un aumento en los contagios, tal como el cierre de panteones.
El mandatario señaló que no es un tema decidido ya que antes se debe hablar con la secretaría de Salud, de Trabajo y Economía para coordinar estrategias y evitar que el virus se esparza; sin embargo, ya se trabaja en un protocolo en el que se necesita la colaboración de los ayuntamientos.
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“Sería un gran error permitirles a los niños que vayan a tocar puertas, y va a ser más grave el error de abrirles, porque no sabe si les está tocando el contagio esa noche”, comentó el gobernador.
Bonilla Valdez sustentó las afirmaciones al precisar que los casos de COVID-19 en la entidad pasaron de 421 a 436 en sólo un día; Tijuana creció de 98 a 106; Ensenada de 56 a 65; Tecate de 18 a 20; San Quintín y Rosarito mantienen sus casos en 15 y seis, respectivamente.
Por ello, el gobernador hizo un llamado a la población para mantener las medidas sanitarias vigentes.