MENTE MUJER

Mente Mujer: Cambio climático impacta a embarazos

No sólo la contaminación perjudica a la población, a los científicos les preocupa las altas temperaturas y la escasez de alimentos que ejercen un efecto negativo en embarazadas

MUNDO

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EMBARAZO. Mente Mujer. Foto: PixabayCréditos: Pixabay

La contaminación, las altas temperaturas y la calidad de los alimentos son algunos de los factores que provocan un impacto importante en la fertilidad humana, los embarazos, incluso la muerte fetal.

Las mujeres embarazadas expuestas a estas variaciones, provocadas por el cambio climático, tienen más probabilidades de tener hijos prematuros o con bajo peso, sobre todo en regiones pobres, siendo África y América Latina los más afectados.

De acuerdo con Zarela Chinolla Arellano, académica de la División de Estudios de Posgrado de la Facultad de Medicina de la UNAM, las zonas de mucho calor pueden generar un incremento de parto pretérmino, esto se debe a los cambios que puede haber en la hidratación de la paciente que genere oligohidramnios, es decir la escasez del líquido amniótico que tiene la función de proteger al feto.

El bajo peso al nacer también es más común a medida que aumentan las temperaturas.

Foto: Pixabay

LAS SECUELAS DE LAS ALTAS TEMPERATURAS

Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de California en Los Ángeles, prevé que para 2100, cerca de 42 mil nacimientos serán afectados por las temperaturas altas, aproximadamente uno de cada 100, en Estados Unidos.

Por otra parte, una investigación publicada por la revista médica estadounidense JAMA Network Open encontró que la alta exposición a la contaminación del aire –en especial del ozono y las partículas PM 2.5– durante el último trimestre del embarazo estaba relacionada con un aumento de 42 por ciento en el riesgo de muerte fetal, ya que estas partículas son inhaladas por la madre y traspasadas al feto, a través de la placenta.

Sin embargo, hallaron que la diferencia entre los embarazos de mujeres afroamericanas y blancas radica en que las primeras tienen menor acceso a los servicios de cuidados prenatales, tienen más probabilidad de vivir cerca de plantas de energía, otras fuentes de polución y pueden ser menos propensas a tener aire acondicionado en sus hogares.

Es decir, las condiciones sociales, económicas y políticas están poniendo en mayor riesgo a las futuras madres ante la amenaza de las olas de calor.

Además, en los últimos 30 años, en las mujeres se ha observado una disminución progresiva tanto de la cantidad como de calidad de óvulos y en los hombres una reducción de la concentración de espermatozoides en el semen, de su movilidad y vitalidad.

La contaminación de la atmósfera, el agua, la comida y el estrés diario son algunos factores que alteran la fertilidad, es por ello que en los últimos años, se muestra un aumento importante tanto en los tratamientos, como en la fecundación in Vitro.

“Anteriormente, las mujeres no batallaban tanto por la búsqueda temprana del embarazo, pero actualmente entre los 30 y 40 años, de 8 por ciento ha subido al 10-12 por ciento de la población general, así como en la calidad espermática de los varones”, agregó Chinolla.

Por Sayuri López

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