Aunque el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, fracasó en su intento de acceder a un segundo mandato, miles de sus seguidores realizaron ayer una protesta festiva en Washington para expresarle su "amor" y denunciar lo que consideran un "robo" electoral, pese a la ausencia de pruebas.
En su trayecto desde la Casa Blanca para ir a jugar al golf, el Presidente republicano, que todavía no ha reconocido su derrota en las elecciones frente al demócrata Joe Biden, pudo ver desde su limusina blindada a varios centenares de sus simpatizantes reunidos en el centro de la ciudad.
El convoy presidencial pasó frente a la Plaza de la Libertad, donde los congregados gritaban "¡Cuatro años más!, ¡Cuatro años más!" o "¡USA!, ¡USA!".
Muchos de ellos agitaban banderas de "Trump 2020" y algunos portaban pancartas en las que podía leerse "Mejor Presidente de la historia" o "Detengan el robo".
Una escena inusual en el corazón de la capital estadounidense, donde Biden obtuvo el 3 de no- viembre 90% de los votos de la ciudad. La mayoría de los asisten- tes viajaron por horas para llegar a Washington, incluyendo la milicia de extrema derecha Proud Boys.
El Presidente saludó en Twitter las manifestaciones en su honor y, exagerando su convocatoria, aprovechó la ocasión para reiterar sus acusaciones —sin fundamento— del supuesto fraude electoral del que se dice víctima.
"Cientos de miles de personas muestran su apoyo en (Washington) DC. Ellos no tolerarán una elección amañada y corrupta!", tuiteó por la tarde.
Entre música y vendedores ambulantes, los manifestantes pro-Trump recorrían las calles en su mayoría sin mascarillas contra el coronavirus y clamando un segundo mandato para el republicano.
Joe Biden, quien cumplirá la próxima semana 78 años, salió ayer por la mañana a dar una vuelta en bicicleta en Delaware
Con información de AFP y EFE