Las varices son venas hinchadas que se visualizan principalmente en las piernas, aunque pueden formarse en cualquier parte del cuerpo. Generalmente las mujeres son más propensas a sufrirlas, a su vez que son quienes más se preocupan por la belleza, por lo tanto su presencia representa un gran problema estético. En consecuencia, te contaremos algunas claves para disminuirlas.
Las varices se producen cuando las válvulas que mantienen el flujo normal de la sangre se dañan o están débiles, causando que las venas se hinchen. Si bien esta afección es muy común, existe un grupo de riesgo específico que puede lucir las piernas con estas marcas, tales como padecer obesidad, ser sedentaria, tener antecedentes familiares con problema de varices y también estar embarazada.
Entre los síntomas claves que anunciarán la presencia de varices se puede destacar algunas marcas sobresalientes, como si fueran cordones en las piernas; sensación de dolor o pesadez en las extremidades; ardor y calambres musculares en las piernas y empeoramiento de las señales después de estar sentado o parado durante mucho tiempo.
Bajo este contexto, para disminuir las varices expertos sugieren tener en cuenta algunas soluciones caseras. La primera de ellas consiste en realizar actividad física o elevar las piernas al momento de descansar. También adelgazando y evitando estar de pie durante largos periodos de tiempo se podrá combatir estas molestias en las venas de las extremidades inferiores. Otra de las alternativas reside en caminar durante 30 minutos al día o realizar natación suave al menos cinco veces a la semana.
Por último, una de las mejores claves reside en una preparación especial que calmará los síntomas en las piernas. La elaboración necesitará de una zanahoria grande, dos hojas de aloe vera y tres cucharadas de vinagre de manzana. Luego se deberá cortar el vegetal en pequeños trozos y hervirlos en una olla para posteriormente triturarlos hasta formar un puré. Después se tendrá que mezclar el gel de la sábila con la zanahoria e incorporar el vinagre de manzana. La pasta deberá ser aplicada sobre las várices y realizar suaves masajes, desde los tobillos hasta las pantorrillas durante 40 minutos.