La Casa Real de España tiene estrictos criterios para muchos aspectos de la vida. En modos de vestir, horarios, actos y hasta en maneras de alimentarse en festividades. Es por eso que Letizia Ortíz, reina consorte del rey Felipe, tiene que ir diagramando el banquete de la Navidad, sobre todo para no caer en malestares estomacales.
La reina Letizia, que fuera periodista antes de entrar al mundillo real, lo que la ha puesto siempre bajo la lupa del mundo, tiene muchos cuidados para su cuerpo y el de su familia. Además de los trabajos fisicos, poseen un menú saludable con platos llenos de omega 3, que no faltan en su dieta.
Para lograr la dieta perfecta y los platillos que deben comer en Zarzuela la reina Letizia, sus hijas y el monarca español, tienen a su servicio a una persona encargada, a la cual la misma consorte supervisa cada semana, diagramando los menús e indicando dónde se compran los insumos para la comida. Las verduras, que se comen de dos a cinco veces al día, son orgánicas y cortadas desde el jardín de la Casa Real.
Dificilmente veremos en el plato de Letizia y su familia comidas fritas o rebozadas. Además, en la comida y cena se bebe agua, aunque al rey Felipe le gusta comer con una copa de vino, además del agua.
Para la cena de Nochebuena, Letizia ya tiene pensado el menú y el tiempo de antesala que llevará hacerlo, ya que desea que el personal lo haga temprano para desocuparse y recibir la Navidad con sus familias. En la mesa de la familia real española se sirve pavo relleno saltado con verduras, pudín de pescado y mariscos, angulas, salmón ahumado, salmón ibérico y foie. A su vez, para el postre comeran frutas tropicales, con helado de crema de café delicias de chocolate, dulces navideños así como polvorones y turrones.